"Algunos asociaron el pino a Cristo, contrastando el árbol que dio origen al pecado de Adán con el árbol de la Cruz por el que Cristo nos redime del pecado”
El P. José de Jesús Aguilar,
canónigo de la Catedral Metropolitana de México y subdirector de Radio y
Televisión de la Arquidiócesis de México, explicó cuál es el sentido cristiano
del tradicional árbol de Navidad.
En un video, el sacerdote
mexicano destacó que si bien “todos los árboles y animales son maravillosas
creaciones de Dios”, debido a “algunas características particulares, algunos de
ellos se han llenado de simbolismo”.
“Por ejemplo, la paloma se ha
convertido en símbolo de paz. El roble en símbolo de fuerza y longevidad. El
olivo, en símbolo de victoria. O el ciprés, por su forma que parece apuntar al
cielo, simboliza la unión entre el cielo y la tierra”.
El P. Aguilar indicó que
“también el pino adoptó varios simbolismos, porque a diferencia de los demás
árboles, que durante el otoño e invierno se quedan sin hojas y parecen morir,
el pino aún en medio de la nieve permanece siempre verde”.
“Esto hizo que en muchas
culturas e convirtiera en símbolo de inmortalidad”, dijo, y destacó que “el
mundo cristiano lo adoptó como signo de Cristo, que al hacerse hombre, morir y
resucitar por la humanidad, nos ofrece la inmortalidad, la vida eterna”.
“También se usó para recordar
la profecía de Isaías, que anuncia que Cristo nacería del árbol genealógico de
Jesé, padre del Rey David. Así dice el texto: ‘una rama saldrá del tronco de
Jesé, un brote surgirá de sus raíces, sobre él reposará el Espíritu de Dios.
Espíritu de Sabiduría e Inteligencia, Espíritu de Prudencia y Valentía,
Espíritu para conocer a Dios y para respetarlo y para gobernar según Sus
preceptos’”.
El sacerdote mexicano indicó
que “este tema se representó mucho en el arte cristiano con el título de árbol
de Jesé, árbol de David, o árbol genealógico de Jesús, en donde en la cumbre
del árbol aparece Jesús o María con el Niño Dios”.
“Finalmente algunos asociaron
el pino a Cristo, contrastando el árbol que dio origen al pecado de Adán con el
árbol de la Cruz por el que Cristo nos redime del pecado”.
El P. José de Jesús Aguilar
señaló que si bien “no podemos negar que para muchos el pino sea un simple
adorno”, es verdad que “para muchos más, el árbol de Navidad puede ser un
elemento que enriquezca estas fiestas que nos recuerdan el nacimiento de
Cristo”.
Fuente: ACI