En lo que va de año se han producido cuatro asesinatos, dos secuestros
frustrados, dos ataques a imágenes religiosas -uno en la Catedral de Ciudad de
México y otro en las Oficinas de la Conferencia del Episcopado Mexicano-, así
como cientos de amenazas y extorsiones a sacerdotes y obispos
Cruz de los Mártires |
El
Centro Católico Multimedial (CCM), difundió un
informe que señala por noveno año consecutivo a México como el país
más violento para los sacerdotes en América Latina, y cuya víctima más reciente
ha sido el
P. Miguel Ángel Machorro.
“Nuestro
país es considerado por noveno año consecutivo, el primer lugar en
crímenes de odio contra sacerdotes, religiosos y laicos de América Latina”,
indicó el CCM en su sitio web.
El
informe del CCM abarca de 2012 a 2017, periodo del actual Presidente Enrique
Peña Nieto, y en el cual han sido asesinados sacerdotes, 2 laicos y se tiene
registro de 2 presbíteros desaparecidos.
“Este
año 2017, en concreto, ha sido un año funesto para el sacerdocio y
la Iglesia en
México, cuatro asesinatos, dos secuestros frustrados, dos ataques icónicos, uno
en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México y otro
en las Oficinas de la Conferencia del Episcopado Mexicano, así como cientos
de amenazas y extorsiones a sacerdotes y obispos, son el triste panorama que
nos hacen aseverar que las cosas están lejos de mejorar”, denunció.
En
lo que van del año han sido asesinados el P. Felipe Altamirano Carrillo, de la
Prelatura del Nayar; el P. Joaquín Hernández Sienfuentes, de la Diócesis de
Saltillo; el P. Luis López Villa, de la Diócesis de Nezahualcóyotl; y el P.
José Miguel Machorro, de la Arquidiócesis de México.
El
CCM recordó que “los miembros de la Iglesia no tienen conflicto con los grupos
que están cometiendo ilícitos en el país”.
Sin
embargo, “existen sectores de la sociedad, que aprovechan la efervescencia de
la violencia y se muestran insolentes contra los religiosos en entidades como
Chiapas, Tabasco, Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Estado de
México, Jalisco, Nayarit, Veracruz, San Luis Potosí, Colima, Culiacán, Tabasco,
Michoacán, Guerrero y Tamaulipas”.
El
informe denunció que “estos grupos que atentan contra sacerdotes y religiosos,
buscan limitar las actividades del trabajo pastoral de la Iglesia en México,
que tienen su acción en el campo sanitario y educativo así como en la acción
asistencial -ayuda, refugio y consuelo-, a favor de los derechos humanos de
migrantes que transitan por suelo mexicano”.
“Los
agentes de pastoral, en específico, los sacerdotes, son más vulnerables a
diversos ataques, como lo muestra la creciente ola de agresión, asesinatos y
desapariciones acaecidos bajo la mirada indiferente de las autoridades, a lo
largo y ancho del país, donde en los últimos años ha proliferado la inseguridad
y el crecimiento de los grupos del crimen organizado”, señaló.
“No
podemos callar más, la sangre de miles de mexicanos se sigue derramando”,
expresó el CCM.
Por
ello, afirmó, “seguiremos sin temor, haciendo un llamado enérgico a las
autoridades del gobierno mexicano, de todos los niveles ya sean federales,
estatales y municipales, a fin de que brinden las garantías al ejercicio del
ministerio sacerdotal en muchas zonas de México, en las que ha repuntado la
violencia”.
Fuente: ACI