Día 20: Qué fácil es
convencer a María
En
septiembre de 1980, la madre Teresa de Calcuta fue a visitar el Hogar Infantil
de Calcula.
Un
niño se estaba muriendo y una de las Hermanas se lo dijo a la madre Teresa, la
cual tomó al niño en sus brazos y se puso a rezar un Padrenuestro y un
Avemaría. El capellán bendijo al niño y la madre Teresa se lo devolvió a la
Hermana.
Aquella
misma tarde el niño comenzó a mejorar y al día siguiente estaba fuera de peligro.
El poder de la oración había obrado el prodigio.
Santa María, ¡lo que eres capaz de hacer por nosotros, sólo por un Avemaría!
Por rezar un Avemaría, ¡cuánto puedo conseguir!Ahora puedes seguir hablando a María con tus palabras, comentándole algo de lo que has leído.
Después
termina con la oración final.
Fuente: Web de Javier