Día 4: No está completa
Dominio público |
La plaza de San Pedro, en Roma, durante siglos
no ha tenido una imagen de la Virgen. Un amigo mío, universitario, en mayo de
1980, al ver tantas estatuas e imágenes en la plaza comentó: "¡Falta la
Virgen!; si tengo oportunidad, se lo digo al Papa".
A los pocos días, en una
audiencia de Juan Pablo II con universitarios, el Papa iba saludando por el
pasillo central del aula a los más cercanos.
Cuando pasó cerca de este amigo,
le dijo: "Santo Padre: en la plaza de San Pedro no está la Virgen, no está
la Madonna ... ". Juan Pablo II lo pensó un momento y le contestó en
castellano: "La Plaza no está completa ... Habrá que terminarla, habrá que
terminarla ... ".
Al año siguiente, en 1981, el Papa inauguraba un mosaico grande dedicado a María, Madre de la Iglesia, que se encuentra en una fachada, sobre la plaza. "Me alegra inaugurar este testimonio de nuestro amor ( ... ), que todos los que vengan a esta plaza de San Pedro eleven la mirada a nuestra Señora, para dirigirle ( ... ) un saludo personal".
Al año siguiente, en 1981, el Papa inauguraba un mosaico grande dedicado a María, Madre de la Iglesia, que se encuentra en una fachada, sobre la plaza. "Me alegra inaugurar este testimonio de nuestro amor ( ... ), que todos los que vengan a esta plaza de San Pedro eleven la mirada a nuestra Señora, para dirigirle ( ... ) un saludo personal".
Si
en tu habitación no tienes una imagen de la Virgen, tu habitación está
incompleta. Si en la sala de estar de tu casa no tienes una imagen de la
Virgen, está incompleta. ¡Ponla! Y ojalá te acostumbres a mirarla, a saludarle,
cuando entres y salgas. Te ayudará a recordar que Ella te acompaña.
Madre mía, te quiero. Quiero quererte más; quiero acordarme más veces de ti. ¡Qué me sirvan tus imágenes!
Continúa ahora hablándole un rato.
Madre mía, te quiero. Quiero quererte más; quiero acordarme más veces de ti. ¡Qué me sirvan tus imágenes!
Continúa ahora hablándole un rato.
Fuente: Web de Javier