En su homilía en Santa
Marta, invita: no aplacemos la conversión
No
escandalicemos a los “pequeños” con la doble vida, porque el escándalo destruye:
fue la invitación del Papa en la homilía de la misa celebrada este jueves en la
Casa Santa Marta del Vaticano. Francisco exhortó a no aplazar la conversión.
“Córtate
la mano”, “quítate el ojo”, antes de “escandalizar a los pequeños”, a los
justos, “a los que se fían del Señor, que sencillamente creen en el Señor”. La
exhortación del Papa en la homilía partió del Evangelio de hoy. Para el Señor,
de hecho, el escándalo es destrucción: “¿Pero qué es el escándalo? Es el decir
una cosa y hacer otra: la doble vida”.
“La
doble vida en todo: soy muy católico, voy siempre a misa. Pertenezco a
esta asociación y a esta otra, pero mi vida no es cristiana, no pago lo justo a
mis trabajadores, me aprovecho de la gente, tengo negocios sucios… doble vida.
Y muchos católicos la tienen y escandalizan”, denunció Francisco.
“Cuántas
veces hemos escuchado, todos nosotros, en el barrio y en muchos lugares: “para
ser católico como ese, mejor ser ateo”. Y eso, el escándalo, te destruye. Y
esto sucede todos los días, basta ver el telediario o mirar los periódicos. En
los diarios hay muchos escándalos, también se da mucha publicidad a los
escándalos. Y con los escándalos se destruye”.
El
Papa puso el ejemplo de una empresa importante que estaba a punto de quebrar.
Las autoridades querían evitar un paro justo, pero que no habría hecho bien y
querían hablar con las personas destacadas de la empresa. La gente no tenía
dinero para sus necesidades cotidianas porque no recibía el sueldo. Y el
responsable, un católico, estaba de vacaciones de invierno en una playa de
Oriente Medio y la gente lo supo también aunque no salió en los periódicos.
“Estos son los escándalos”, dijo Francisco.
“Jesús
dice, en el Evangelio, sobre estos que provocan el escándalo, sin decir la
palabra escándalo pero se entiende: “Llegarás al cielo y llamarás a la puerta
y: ‘¡Soy yo, Señor! ¿No te acuerdas? Iba a la Iglesia, estaba cerca de ti,
pertenecía a esta asociación, hacía esto… ¿No te acuerdas de todas las limosnas
que di?’ – ‘¡Sí, me acuerdo! Las limosnas eran todas sucias. Todas robadas a
los pobres. No te conozco’. Esa será la respuesta de Jesús a los que tienen
doble vida”.
“La
doble vida viene de seguir las pasiones del corazón, los pecados capitales que
son las heridas del pecado original”, dice el Papa. La primera Lectura exhorta
de hecho a no secundarle, a no confiar en las riquezas, no decir: “me basto a
mí mismo”.
Y
Francisco invitó a no aplazar la conversión. “A todos nosotros, a cada uno de
nosotros, nos hará bien, hoy, pensar si tenemos doble vida en nosotros, que
aparentamos ser justos, parecemos creyentes, buenos católicos, pero bajo mano
somos otra cosa. A veces pensamos: ‘Ya tendré tiempo de convertirme, pero hoy
no: mañana’. Pensemos en esto. Y aprovechémonos de la Palabra del Señor y
pensemos que el Señor en esto es muy duro -concluyó-. El escándalo destruye”.
Radio
Vaticano
Fuente:
Aleteia