De producirse, la visita no tendría solo un valor pastoral y ecuménico, sino también supondría una llamada a la política europea hacia los refugiados y migrantes que llegan ininterrumpidamente desde el norte de África y Oriente Medio
El
papa Francisco podría visitar próximamente la isla griega de Lesbos, lugar testigo
de la llegada y ahora expulsión de miles de refugiados procedente de Oriente
Medio y África.
El Sínodo de la Iglesia Ortodoxa de Grecia se ha mostrado
favorable a una posible visita del Pontífice a su país e informa que
ha invitado al patriarca ecuménico Bartolomé I “en un esfuerzo conjunto para
crear conciencia sobre el problema de los refugiados”, informó la web Dogma.
Desde
el inicio de su pontificado, el Santo Padre se ha mostrado preocupado y cercano
a la realidad de los refugiados, hasta tal punto que su primer viaje fue a
Lampedusa, isla italiana por la que llegan a Europa miles de
migrantes.
Desde
el Vaticano el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el padre
Federico Lombardi, declaró que “actualmente no tengo nada concreto que
declarar sobre un posible viaje del Papa a Grecia. No hay una decisión ni un
programa”. Aunque sí añadió que “no desmiento que existan contactos a
propósito de un posible viaje”.
La
visita, que podría ser según han informado algunos medios el próximo
15 de abril, prevé también la presencia del patriarca de la Iglesia
Griega desde el 2008, Jerónimo II, y al patriarca ecuménico Bartolomé I. De
producirse, la visita no tendría solo un valor pastoral y ecuménico, sino
también supondría una llamada a la política europea hacia los refugiados y
migrantes que llegan ininterrumpidamente desde el norte de África y Oriente
Medio.
Los países
que están sufriendo el flujo migratorio de forma más intensa desde
hace varios años son Italia, España y Grecia. Pero, este flujo se extendió
a toda Europa. Y ahora, en el momento en el que se han iniciado en Grecia las
deportaciones de los refugiados y migrantes, este gesto de los tres líderes
religiosos está destinado a ser una llamada a las raíces cristianas de
Europa y pedirá al Viejo Continente solidaridad hacia el prójimo que huye de
guerras, persecuciones y situaciones difíciles.
Fuente: Zenit
Fuente: Zenit