La Jornada por la Vida es una ocasión propicia para tomar mayor conciencia del valor de la persona humana e implicarse en la defensa de los seres más vulnerables, débiles e indefensos
La
Iglesia en España celebra la Jornada por
la Vida 2016, hoy 4 de abril, en lugar del 25 de marzo, fiesta de la Anunciación del
Señor, ya que en esta ocasión ha coincidido la fecha con el Viernes Santo.
Con motivo de este día, la Subcomisión
Episcopal para la Familia y la Defensa de la Vida ha difundido un mensaje en el que llama a promover y proteger
la ecología humana. “En este cuidado de la casa común debe ocupar un
puesto central la ecología humana, que debe ser promovida y protegida como
expresión de quienes son no solo criaturas, sino más aún, ‘imagen y semejanza’
de Dios”, señalan los obispos españoles.
En el cuidado de la ecología humana
–prosiguen– “se encuentra como elemento primordial el cuidado de todas las
personas, desde el inicio de su existencia hasta su muerte natural”. “La
encíclica Laudato si’ nos habla de la necesaria ecología ambiental, social,
económica, cultural y de la vida cotidiana, todo ello con vistas de promocionar
el bien común”, recuerdan los prelados en su escrito titulado “Cuidar la vida,
sembrar esperanza”.
“La ecología integral es inseparable de
la noción de bien común, un principio que desempeña un papel central y
unificador en la ética social”, destacan los miembros de la Subcomisión
Episcopal para la Familia y la Defensa de la Vida, al tiempo que explican que
“el bien común presupone el respeto a la persona humana en cuanto tal, con
derechos básicos e inalienables ordenados a su desarrollo integral”.
“La vida humana necesita ser protegida
desde el comienzo de su existencia y promovida y acompañada hasta su final.
Como señala el papa Francisco, no tiene sentido luchar por la protección de los
animales, de los bosques y los océanos y no inmutarnos ante el drama del
aborto”, añaden los obispos.
Asimismo, manifiestan que al igual que es
importante implicarse en el cuidado de la “casa común”, es trascendental
“trabajar juntos por la protección de la vida”, ya que es responsabilidad de
todos “trabajar por una cultura de la vida que contribuya al desarrollo de una
sociedad plenamente humana”.
“Defendamos la naturaleza y, en ella,
defendamos la vida humana en todas sus fases, vicisitudes y condicionantes. No
hay nada ni nadie más digno en la creación que el ser humano, pues es la única
criatura en la tierra que Dios ha querido por sí misma y que conoce y ama de
modo personal: nos ha creado a su imagen, somos amados incondicionalmente por
Dios y estamos llamados a ser sus hijos”, insisten los firmantes del mensaje.
Por último, los prelados invitan para que
en este Año de la Misericordia, se contemple “el inicio de este don de
Dios en el comienzo de nuestra propia existencia”, y oran a Dios para que “nos
conceda la capacidad de reconocer su misericordia en todo lo creado, de modo
particular y eminente en los hermanos y hermanas que nos ha
regalado”. “Que ellos sean, asimismo, objeto de nuestro cuidado, de
nuestro servicio, de una misericordia personal que quiere hacer realidad el
lema de este año jubilar, «Misericordiosos como el Padre», cuidando la vida y
sembrando esperanza”, concluyen.
La Jornada por la Vida –que se celebra en
muchos países– es una ocasión propicia para tomar mayor conciencia del valor de
la persona humana e implicarse en la defensa de los seres más
vulnerables, débiles e indefensos.
Fuente: Zenit