Ante una “cadena piadosa” que circula por
las redes sociales
La Iglesia celebra ciertas fiestas en
fechas fijas y otras en fechas diferentes que van cambiando según las
circunstancias, son las llamadas fiestas móviles. Una de estas fiestas móviles
es la solemnidad de la Anunciación del Señor. ¿Y por qué es movible?
Porque, aunque la Anunciación del Señor
se celebre nueve meses antes de la solemnidad de la natividad (25 de
diciembre), no necesariamente se tiene que celebrar el 25 de marzo; es más,
pocas veces la Anunciación se ha celebrado exactamente en esa misma fecha.
Son fechas aproximadas pues, entre otras
cosas, Jesús tampoco nació propiamente un 25 de diciembre del año cero. Son
convencionalismos, lo importante es la celebración litúrgica de las fiestas y
solemnidades en sí mismas.
Efectivamente, mirando los calendarios
litúrgicos de diferentes años, la solemnidad de la Anunciación se celebra en
fechas diferentes, unas antes de semana santa y otras después de la misma, en
proporciones casi iguales; por tanto no siempre cae el mismo día.
Eso sí nunca se hará coincidir, bajo
ningún criterio, la celebración de la Anunciación del Señor con los actos
litúrgicos propios del Viernes Santo por obvias razones. Este año la
solemnidad de la Anunciación del Señor se celebra después de semana santa el 4
de abril, por tanto no coincide con el viernes santo (25 de marzo), como dicen
algunos.
Todo esto en ocasión de que está
circulando por las redes sociales una ‘cadena piadosa’ con rasgos de
superstición como aquellas que piden multiplicar oraciones a San Judas Tadeo o
reenviar mensajes para que Dios haga milagros.
Esta nueva cadena dice, erróneamente, que
éste año, al coincidir –según los ‘autores’ de dicha cadena- en una misma fecha
el viernes santo y la solemnidad de la Anunciación del Señor (que como se ha
dicho anteriormente es un error), se le llama ‘EL AÑO DEL GRAN PERDÓN’; y ésta
es una coincidencia, que ‘supuestamente’, sucede cada 141 años.
Y aunque fuera así, que entre otras cosas
¿quién lo asegura?, esto no es más que una ‘confusión’ más, y que no tiene
ninguna tradición eclesial ni tiene ninguna base teológica, ni tiene ninguna
aprobación oficial por parte de la Iglesia.
Como tampoco habrá un pronunciamiento por
parte de la misma para desmontar ésta expresión pseudoreligiosa. Según quien se
ha inventado ésta ‘cadena’ Dios, a través de la Iglesia, concede este día el
perdón de todos los pecados con tan solo visitar a una Iglesia que sea dedicada
a la Santísima Virgen.
Esto es un grave error pues ya se sabe
que el perdón viene, única y exclusivamente de manera ordinaria, en el
sacramento de la confesión; y además, para beneficiarse de una indulgencia
plenaria o parcial, hay otros requisitos entre los cuales está el mismo
sacramento.
Se ha querido reforzar este ‘Año del gran
perdón’ haciéndolo coincidir con el Jubileo de la misericordia. Y lo que se ha
hecho es manipular las palabras el Papa Francisco que están en la Bula de
convocatoria del año de la misericordia. “El Papa dijo: “Ha llegado de nuevo
para la Iglesia el tiempo de encargarse del anuncio alegre del perdón” (MV,
10); el Papa Francisco nunca dijo en la bula Misericordiae Vultus que ha
llegado de nuevo para la Iglesia ‘el año del gran perdón’.
Fuente: Aleteia