Nos une
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Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Este verano
hemos tenido a varias personas que pasan el verano en la zona y se han unido a
la comunidad en la Liturgia y la Eucaristía. Con muchos apenas hemos
intercambiado palabras, pero realmente se han creado lazos que no dependen de
largas conversaciones, sino de sabernos unidos ante el mismo Señor; es Él quien
nos une.
Esta semana
empezaron las primeras despedidas, y poco a poco todos irán regresando a sus
casas. Se notan los huecos, y doy gracias al Señor por la “comunidad de verano”
que nos ha regalado. Me doy cuenta de que, cuando nos reunimos para orar, no
ocupamos simplemente un lugar al lado del otro, sino que miramos en la misma
dirección y estamos unidos en Cristo.
«Pues, donde
dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos» (Mt 18,20).
Por lo tanto,
las despedidas para un cristiano encuentran sentido mirando en la misma
dirección. Así como no han sido necesarias las palabras para unirnos, la
distancia tampoco es impedimento: basta con dirigir la mirada a Aquel que nos
une, y nos encontramos en Él.
Después de
Pentecostés, también los apóstoles experimentaron despedidas. Muchos partieron
hacia tierras lejanas y probablemente aquí no se volvieron a encontrar, pero
permanecieron profundamente unidos en la fe y en la misión que el Señor les
había confiado.
Hoy las
despedidas no son tan definitivas como antes: tenemos medios para seguir
comunicándonos, para seguir unidos y compartir lo vivido.
En Cristo, la
cercanía no depende de las circunstancias, sino de la profundidad de lo que nos
une. No es lo mismo compartir una actividad que compartir una dificultad o algo
más profundo. En la medida que se profundiza, se gana en cercanía, hasta llegar
a vivir con un solo corazón en Él.
Hoy el reto del
amor es que des gracias al Señor por las personas que has encontrado este
verano. Sigue unido a ellas en la oración, y de vez en cuando comparte algo que
os ayude a todos a poner la mirada en Él.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
24 agosto 2025
Fuente: Dominicas de Lerma