“Está el mundo muy revuelto y nos hace falta llevar paz a nuestros círculos de sociedad, a nuestros círculos familiares, a nuestros círculos de trabajo”
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Crédito: Nicolás de Cárdenas / ACI Prensa |
El español
Borja Milans del Bosch ha puesto en marcha la plataforma 10talentos.org para ofrecer
cursos de formación en liderazgo humanista católico basado en el respeto
esencial a la dignidad del ser humano que lleva tratarlo de manera virtuosa.
Esta nueva
iniciativa, impulsada por cuatro laicos y un sacerdote, nace con el propósito
de fomentar el desarrollo del potencial y del liderazgo cristiano de las
personas, enfocándose en los carismas, dones y talentos recibidos de Dios, a
través de cursos en formato presencial y online, tanto en España como en los
países que lo soliciten, especialmente en Hispanoamérica.
Por el momento,
está disponible el curso Líderes de paz: ser ejemplo cristiano,
pero próximamente se abrirá la posibilidad de acceder a otras propuestas
como El taller del perdón o un curso de Optimización
de los dones y talentos.
En conversación
con ACI Prensa, Milans del Boch explica que el sentido del primero de los
cursos se encuentra en que “está el mundo muy revuelto y nos hace falta llevar
paz a nuestros círculos de sociedad, a nuestros círculos familiares, a nuestros
círculos de trabajo”.
Para ello es
necesario que el católico se haga fermento de paz en cada ambiente potenciando
algunas actitudes y valores como perdón, alegría, cercanía, ayuda o solidaridad
para convertirse en un referente.
Cuando eso
sucede, “da igual la jerarquía que tengamos, da igual la posición que
tengamos”, porque al comportarnos así “podemos ser referentes para muchas
personas”, resume Milans del Bosch, con cerca de dos décadas de experiencia en este
tipo de programas en instituciones y compañías de diferentes sectores.
Así, se
comienza a ejercer un liderazgo humanista que, “sobre todo por una condición”,
destaca el especialista, es específicamente católico: “considera al ser humano
como alguien digno, a quien hay que respetar y tratarle en virtud”.
Por otro lado,
Milans del Bosch considera que también es característico del español y, por
extensión, de la comunidad hispanoamericana: “prueba de ello es que cuando los
españoles llegamos a ese nuevo continente que resultó con el tiempo ser el
continente americano, lo que hicimos fue ver a los que había allí ya viviendo,
los indígenas, verles como seres con alma y dignidad”.
“Hasta el punto
fue humanista la relación de liderazgo que se produjo, que se fomentó la
familia, el mestizaje, la caridad, que eran los hospitales, se fomentó la
cultura, que eran los colegios y las universidades, se fomentó el ordenamiento
social y administrativo, alcaldías, pueblos, comarcas, y se fomentó, por
supuesto, la fe católica en las misiones y en los conventos y en los
monasterios”, añade.
Así, la oferta
formativa que comienza a proponerse ahora “está dirigida a fomentar un
liderazgo humanista bajo parámetros católicos” y que se opone de alguna manera
al modelo anglosajón, según la visión de Milans del Bosch. “El liderazgo
humanista trata y ve por encima de todo a la persona su dignidad, su potencial,
los dones y los talentos que ha recibido. Y, a partir de ahí, permite que la
persona se descubra, se redescubra, para que sea quien está llamada a ser”.
Este
planteamiento también defiende que “nadie puede ser mejor profesional que
persona”, porque “por muy ingeniero que sea un ingeniero magnífico, si en lo
humano es un frío, calculador y temerario, probablemente queme al equipo”. En
cambio, “si tenemos una persona que trabaja con confianza, con cercanía,
envolviendo a la gente, dándoles cobijo, ayuda, desarrollo y posibilidad de
crecimiento personal, probablemente el rendimiento sea mayor”.
De todo esto ya
ha hablado en el pasado Borja Milans del Bosch en un libro titulado Ser
ejemplo, pequeños grandes líderes que trata de responder a un
anhelo latente común que el autor ha identificado en el mundo de la empresa:
necesidad de afecto, de reconocimiento y de actitud positiva. Entre ellos,
destaca que el reconocimiento no debe entenderse como una valoración de
méritos, sino como la oportunidad de conocer al otro en cada interacción, de
tal forma que “te descubro en lo humano y acabo por encontrarme una maravilla
en lo profesional”.
Para poder
saciar ese triple anhelo, es necesario poner en juego cuatro metacompetencias:
mentalidad positiva, coraje, valores humanos universales y humildad, de tal
manera que si eres “una persona que transmites positividad, empujas con coraje
para sacar situaciones difíciles adelante, funcionas con valores y eres una
persona llana, humilde y accesible, dime si no vas a brillar sin ser estrella”,
explica Milans del Bosch.
Este esquema se
aleja mucho del reinvéntate y sé tu mejor versión”, que, a juicio del autor “es
estar al servicio de ti mismo”, cuando de lo que se trata es “de que te
redescubras, que quites lo que cubre tu verdadera esencia, tu brillo, tu
potencial, tu capacidad, tus dones, tus talentos. Y, redescubriéndote, vas a
ser quien estás llamado a ser, que es mucho más potente que reinventarse, que
ser tu mejor versión”.
Oratoria
para sacerdotes
Borja Milans
del Boch también ofrece cursos de oratoria para sacerdotes. Hace unos años,
experimentó una conversión muy fuerte en Medjugorje. Antes de eso, “iba a misa
porque me la hacía entretenida, porque hablaba bien y me enganchaba”,
reconoce.
Ahora, sabiendo
que en la Eucaristía no sólo busca eso, considera que “sí ayuda que el
sacerdote me acerque el mensaje muy al día”.
Para Milans del
Bosch, “si tenemos el mejor logo del mundo, que es la cruz, la mejor promesa
del mundo, que es la vida eterna, espacios y auditorios en todo el mundo y un
mensaje brutal que explicara a todo el mundo, necesitamos sacerdotes que
comuniquen bien a todo el mundo”.
“Las
herramientas de oratoria son absolutamente fundamentales en un sacerdote, que
tiene que hablar para todo tipo de personas con un mensaje muy enriquecedor,
absolutamente aplicable al día a día, del más joven al mayor, que nunca pasa de
moda porque nunca ha estado de moda”, añade.
Por Nicolás de
Cárdenas
Fuente: ACI Prensa