Al cumplirse 80 años del Voto a
María Salus Populi Romani, el
4 de junio de 1944, que permitió la salvación de Roma durante la Segunda Guerra
Mundial, el Papa Francisco elevó sus oraciones para que la Madre de Dios
obtenga la paz a toda la humanidad ahora, en una época marcada por diversas
guerras en todo el mundo.
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| La imagen de María Salus populi romani. Crédito: Flickr Lawrence OP CC BY-NC-ND 4.0. Dominio público |
“Que
Ella, la Virgen de ternura y de consuelo, refuerce la fe, la esperanza y la
caridad para irradiar en el mundo el amor y la misericordia de Dios”, agregó el
Santo Padre.
El
Papa Francisco resaltó la devoción histórica de los romanos a esta imagen, a la
que le han pedido su protección ante plagas, desastres naturales y guerras; y
ante la cual él mismo reza antes y después de
cada uno de sus viajes internacionales, en la Basílica de Santa María la Mayor,
como se aprecia en esta publicación de marzo de 2021 de la Oficina de Prensa de
la Santa Sede.
El Papa Francisco destacó además
que tras 80 años del Voto a la Salus
Populi Romani, protectora del pueblo romano, esta fecha es
ocasión para pedirle el fin de las guerras en el mundo, como la de “la
martirizada Ucrania, Palestina e Israel, Sudán, Myanmar”, entre otros.
El
Santo Padre resaltó que ante estos conflictos “no se puede ceder a la lógica de
las armas”, y recordó que “la paz es un don de Dios, que debe encontrar hoy
también corazones disponibles a acogerlo y a obrar para ser artífices de
reconciliación y testimonios de esperanza” en todo lugar como “la familia, el
trabajo, la escuela y entre los amigos”.
¿Qué es el Voto a María Salus Populi Romani?
En
su mensaje, el Papa Francisco destacó que por primera vez hoy se celebra “la
memoria litúrgica de Santa María Salus Populi Romani”; y
recordó que hace 80 años, miles de personas le rogaron que salve Roma.
Ese día, alrededor de las 7:00 p.m.
(hora local), las tropas aliadas entraron a la Ciudad Eterna y no hallaron
resistencia por parte de los nazis, que salieron de Roma por el norte.
El 6 de junio, en un mensaje radial, el venerable Papa Pío XII, que lideró
los esfuerzos de la Iglesia Católica para salvar
a unos 800.000 judíos, resaltó que “la Ciudad Eterna ha sido preservada
de un peligro inconmensurable”.
“Con indecible reconocimiento
veneramos a la Santísima Madre Dios y Madre nuestra, María, que con el título y
las glorias de Salus populi romani ha ofrecido una nueva prueba de su
benignidad materna, que quedará siempre perenne en los anales de la Urbe”, resaltó
el Papa Pacelli.
Por Walter
Sánchez Silva
Fuente: ACI
