UN DETENIDO TRAS PROVOCAR UN INCENDIO EN UN CONVENTO MIENTRAS SE CELEBRABA LA MISA

Un hombre ha sido detenido en la ciudad española de Cuenca después de provocar un incendio en el convento de las Concepcionistas Franciscanas a primera hora de la mañana mientras se celebraba la Misa.   

Incendio provocado en el convento de la Inmaculada Concepción
en Cuenca. Crédito: PP Cuenca. Dominio público
Según detalla COPE, cadena de radio propiedad de la Conferencia Episcopal Española (CEE), un individuo roció con gasolina la puerta principal del convento y después prendió el lugar con un fósforo provocando el incendio en el exterior del templo. 

En el interior, al menos se encontraban 10 religiosas y un número indeterminado de laicos, junto al sacerdote que celebraba la Eucaristía. 

Varios vecinos que presenciaron los hechos retuvieron al incendiario hasta que llegaron al lugar miembros del Cuerpo Nacional de Policía, mientras algunos trataban de apagar la importante deflagración con extintores obtenidos de los locales comerciales cercanos, labor que completaron a tiempo los bomberos sin que se hayan registrado heridos. 

El hombre detenido “ha protagonizado con anterioridad otros incidentes en la ciudad”, según recoge la agencia Europa Press

Una orden de clausura vinculada a Isabel la Católica

El Monasterio de la Inmaculada Concepción de Cuenca fue edificado a principios del siglo XVI y de aquella época aún se conservaba la portada que ha sido incendiada este viernes, obra de Pedro de Alviz. En el año 2021 el monasterio fue declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento Histórico-Artístico Nacional. 

La Orden de la Inmaculada Concepción ocupa el lugar desde hace más de 5 siglos. Fue fundada por la noble lusa Santa Beatriz de Silva, que servía como dama de honor de la Reina Isabel de Portugal.

Tras una visión de la Virgen, que le pedía fundar una orden en honor de su Inmaculada Concepción, huye a Toledo, donde vive en un monasterio durante 30 años sin ser religiosa. 

Fue Isabel La Católica, hija de la reina portuguesa del mismo nombre, quien impulsó la creación de la nueva orden. En 1484, la reina castellana cedió unas casas en Toledo a la nueva comunidad.

Fue el Papa Inocencio VIII quien, a petición de Santa Beatriz y de la Sierva de Dios Isabel de Castilla, aprobó la nueva orden en 1489. 

Por Nicolás de Cárdenas