Los musulmanes, Ramadán; los cristianos, Cuaresma; tenemos dos tiempos importantes que se celebran de manera parecida, pero en el fondo, son muy distintos
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No, el Ramadán no es la Cuaresma de
los musulmanes. Aunque podemos encontrar rasgos comunes entre ambas, lo cierto
es que hay también importantes diferencias. La principal radica en el sentido
profundo de estas festividades.
¿Qué se conmemora en cada
uno?
La Cuaresma conmemora la pasión, muerte y
resurrección de Cristo, en tanto que es Hijo Encarnado de Dios. Por su parte,
el Ramadán hace memoria de la revelación del Corán al profeta Muhammad, palabra
increada de Dios y descendida a los hombres.
Partiendo de
este hecho, el paralelismo entre Ramadán y Cuaresma no es casual.
Ayuno en Cuaresma y Ramadán
En la
tradición árabe antes del islam, el Ramadán, noveno mes del
calendario musulmán, ya era considerado como un mes sagrado. A la llegada del islam se
incorporó como mes del
ayuno. Marcaba así una ruptura con el mundo judío al
suprimir la obligación de ayunar el día décimo del primer mes de año. En su
lugar, se estableció el mes de Ramadán como mes del ayuno, a semejanza de la
Cuaresma cristiana.
De modo
general, podemos decir que las dos son conmemoraciones que marcan una pausa
importante dentro del calendario litúrgico. En el caso de la Cuaresma, los cuarenta
días de Jesús en el desierto antes de iniciar su vida pública, donde
fue tentado por el diablo.
Purificación y vuelta a
Dios
En el mismo
sentido, están estrechamente relacionadas con un carácter purificador. No
solo de las imposiciones de la vida cotidiana, sino de un hombre cuyo espíritu
se vuelve a Dios, origen cierto de todo lo creado.
La Cuaresma y el
Ramadán exigen una renuncia a los placeres del mundo. Una
introspección, favorecida por una oración que se
intensifica, acompañándose de ayuno y abstinencia.
En el caso
de los cristianos, ligado al desierto
como momento de dificultad, de búsqueda, pero vivido con un horizonte de
esperanza: la Pascua de Resurrección. Para el islam, también es un mes de
espera: la revelación del mensaje de Dios a los hombres.
El rigor en el ayuno
Los musulmanes tienen prescrito en
el Corán el ayuno y la abstinencia de todo alimento sólido o líquido durante
las horas de luz (Qur. 2, 183-187). Por tanto,
es una obligación de la que solo quedan exentos los enfermos, ancianos, niños,
mujeres embarazadas y personas en itinerancia.
En el caso
de la Cuaresma, este ayuno ha ido perdiendo rigor y desprendiéndose de un
carácter social para primar su aspecto más personal.
Así, el Papa
Pablo VI fijó el ayuno y la abstinencia para el miércoles de Ceniza y el
viernes Santo (Constitución Apostólica Poenitemini, 1966).
Calendario lunar
A pesar de
la diferencia de calendarios (solar para los cristianos y lunar para los
musulmanes), ambos periodos están marcados por el calendario lunar. En el
caso de la Cuaresma, coincidiendo con la primera luna llena después del
equinoccio de primavera. En consecuencia, son festividades movibles, y varían
año a año.
Para un
musulmán, avanza aproximadamente 15 días cada año. En el caso de los
cristianos, se sitúa entre el 22 de marzo y el 25 de abril.
Cada una celebra su final con un momento crucial en la vida de fe: los cristianos, la Resurrección de Jesucristo; los musulmanes, la fiesta del Cordero (Id al-Fitr). Ambas, motivo de alegría y celebración con familiares y amigos.
María Ángeles Corpas
Fuente: Aleteia