En Él
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Al ir a
comulgar, tenemos que subir un escalón. Cuando unas veces subimos, nos cruzamos
con las que bajan y, al no haber un punto de apoyo, suelo extender el brazo
para que una hermana se pueda sujetar y no tropiece ni pierda el equilibrio.
Y hace uso de
la ayuda: puedo sentir que confía, pues realmente se apoya en mí. Me impresiona
la confianza con la que lo hace, ya que siento que su seguridad en ese momento
depende de mí. Su firmeza en el apoyo siempre responde a esta inquietud y me
conmueve.
Detrás de ella,
me toca a mí recibir a Jesús, y siempre voy con esa referencia de confianza: es
el momento en que debo confiar y permitir que Él me sostenga fuerte en todo lo
que vivo, incluso en lo que no entiendo.
Y es que Cristo
está a nuestro lado extendiendo Su brazo firme para acompañarnos en nuestros
miedos e inseguridades. Él llega a donde nadie más puede llegar, conoce tu
corazón y, sin juzgarte, te da la mano para seguir caminando.
Por mucho que
nos quieran, hay una parte de nuestro interior a la que no llegan, ahí donde
residen las vivencias más profundas, tu historia, lo que realmente te mueve...
Cristo te entiende y, siempre que le dejamos, entra en lo más íntimo de nuestro
corazón para sostenernos y consolarnos.
Por eso, el
corazón descansa cada vez que ponemos la confianza en Cristo, cuando nos
dejamos caer en su brazo sabiendo que no nos va a fallar en los peldaños que
encontramos, y también cuando no conseguimos llegar al que tenemos cerca
sufriendo: dejar que Jesús se encargue, apoyar todo en la oración, desde ese
lugar al que solo Él puede llegar.
"El Señor
es mi auxilio: nada temo" (Heb 13,6).
Hoy el reto del
Amor es dejar que Cristo te sostenga. Háblale de esa persona que tienes en el
corazón y a la que no has podido llegar. Confía en que Cristo se encarga: Él va
a llegar donde tú no llegas.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
12 agosto 2023
Fuente:
Dominicas de Lerma
