Este jueves se dio a conocer el programa del 42 viaje apostólico de Francisco a Mongolia, del 31 de agosto al 4 de septiembre, con el lema Esperando juntos
![]() |
Giorgio Marengo celebrando misa en 2018. Foto: CNS. Dominio público |
Francisco despegará
de Roma el jueves 31 de agosto a las 18:30 horas de Italia para aterrizar el día
siguiente a las 10 horas locales en el aeropuerto Genghis Khan de Ulán Bator,
la capital.
Allí tendrá una recepción oficial
que, sorprendentemente, ocupa el total de su agenda para ese día. Lo cual puede
significar que sea muy larga y en ella se reúna con muchas personas diferentes,
que descanse inmediatamente después o que tenga más actos previstos que de
momento no se hayan hecho públicos.
Al día siguiente, el sábado 2 de
septiembre, participará en una ceremonia de bienvenida en la plaza Sukhbaatar. Se
reunirá con el presidente, Ukhnaagiin Khürelsükh, y pronunciará un discurso
ante la sociedad civil y el cuerpo diplomático en el Palacio del Estado.
Después tendrá un encuentro con el
primer ministro Luvsannamsrain Oyun-Erdene y a las 16:00 horas locales se
dirigirá a los obispos, sacerdotes, misioneros, personas consagradas y agentes
de pastoral en la catedral de San Pedro y San Pablo.
El domingo 3 de septiembre, en el
Teatro Huno, el Papa participará en un encuentro interreligioso y ecuménico.
Luego, a las 16:00 horas, celebrará Misa en el Steppe Arena, un estadio
de hockey con capacidad para 2.600 personas en sus
gradas. Curiosamente, más personas que el total de católicos del país, que no
llegan a los 1.500. Finalmente, el lunes 4 de septiembre se reunirá con
trabajadores de entidades caritativas y se despedirá en el aeropuerto Genghis
Khan antes de volver a Roma
La esperanza, virtud compartida
El lema de la visita será Esperando juntos. «Hemos querido resaltar el doble
significado del viaje apostólico del Santo Padre a Mongolia, que es una visita
pastoral y una visita de Estado», explicó este jueves la Santa Sede al dar a
conocer el programa. En este sentido, se ha incluido en el titulo «una virtud
claramente cristiana como la esperanza, pero ampliamente compartida en
ambientes no cristianos». Al decir «juntos», añadieron, se subraya la
colaboración bilateral entre Mongolia y la Santa Sede.
«Esperar juntos representa un ideal
común y también un elemento que puede caracterizar este viaje apostólico», detallaron
desde la Santa Sede. En sus palabras, «la presencia del Santo Padre representa
para esta pequeña porción del pueblo de Dios una señal grande de esperanza y
ánimo».
En Mongolia la comunidad católica es
minúsucla. Pero el Papa les da tanta importancia que, como reconocimiento a la
labor pastoral de la Iglesia local, en agosto pasado creó cardenal al prefecto
apostólico de Ulán Bator, el italiano Giorgio Marengo. Pocos meses después
comenzó a anunciar su intención de viajar a Mongolia, una visita que finalmente se confirmó el 3 de junio, solo cuatro días antes de la
operación abdominal a la que se tuvo que someter.
Este jueves también se dio a conocer
el logo del 42 viaje apostólico de Francisco fuera de Italia. Contiene el
perfil de las fronteras de Mongolia pintadas en rojo y azul, sus colores
nacionales. Y dentro una ger, la vivienda
tradicional del país en forma de tienda, de cuya chimenea brota un humo amarillo
como la bandera del Vaticano.
Fuente: Alfa y Omega