Richard Pain, obispo emérito de Monmouth, contó que había decidido convertirse al catolicismo tras reflexionar sobre su futuro después de un retiro
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Richard Pain. Dominio público |
Se ha convertido en el primer prelado de Gales
en entrar en el ordinariato personal de Nuestra Señora de Walsingham, una
circunscripción eclesiástica que depende directamente del Vaticano, sin
necesidad de un arzobispo metropolitano.
Será el 2 de julio cuando el ordinario
de Walsingham, Keith Newton, reciba oficialmente a Pain en
plena comunión en la iglesia de San Basilio y Santa Gwladys. Newton afirmó
estar «encantado» de que «después de mucha oración, Richard haya pedido ser
recibido en la Iglesia católica».
Sobre su decisión el propio Pain contó
que había decidido convertirse al catolicismo tras reflexionar sobre su futuro
después de un retiro: «El proceso de discernimiento continúa a lo largo de la
vida y está constantemente moldeado por el contexto y por el susurro de la voz
de Dios».
Añade: «Tengo mucho que agradecer por la
experiencia adquirida durante toda una vida como anglicano». El obispo emérito
Pain está casado y es padre de dos hijos. Fue ordenado sacerdote en la catedral
de Newport, en Gales, y ha servido todo su ministerio en la diócesis de
Monmouth.
Ahora se une al ordinariato de Nuestra
Señora de Walsingham, una estructura similar a una diócesis, inaugurada en 2011
bajo el Pontificado de Benedicto XVI para permitir que
antiguos anglicanos entraran en comunión en la Iglesia católica, aunque
conservando algunos elementos de la tradición de la Iglesia de Inglaterra.
Fuente: El Debate