Se publicó el “Instrumentum laboris”, el documento de orientación para los trabajos de la Asamblea General de octubre de 2023 y del 2024 sobre el tema de la sinodalidad
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Se publicó el Instrumentum laboris para la XVI Asamblea General del Sínodo |
Dividido en dos macrosecciones, es fruto de las
aportaciones de las etapas diocesana y continental y da cuenta de la
experiencia de las Iglesias de todo el mundo que sufren guerras, desigualdades,
pobreza y heridas de abusos
Unas sesenta páginas con la experiencia de
Iglesias de todas las regiones del mundo que sufren guerras, cambios
climáticos, sistemas económicos que producen "explotación, desigualdad y
'descarte'". Iglesias cuyos fieles sufren el martirio, en países donde son
minorías o donde tienen que hacer frente a " secularización cada vez más
intensa, y a veces agresiva".
Iglesias heridas por abusos "sexuales, de
poder y de conciencia, económicos e institucionales", heridas que
necesitan respuestas y una "conversión". Iglesias que abrazan los
desafíos, sin miedo y sin intentar "resolverlos a toda costa",
comprometiéndose en el discernimiento sinodal: “Sólo así las tensiones podrán
convertirse en fuentes de energía y no caer en polarizaciones
destructivas".
Crecer como Iglesia sinodal
Este 20 de junio se publicó el Instrumentum laboris,
el documento que servirá de base para los trabajos de los participantes en el
Sínodo sobre la sinodalidad previsto para octubre de este año en la Ciudad del
Vaticano y que proseguirá hasta el 2024. Se trata de un punto de partida y
ciertamente no de llegada. De hecho, el documento recoge la experiencia de las
diócesis de todo el mundo en los últimos dos años, a partir del 10 de octubre
del 2021, cuando Francisco puso en marcha un camino para comprender qué pasos
dar "para crecer como Iglesia sinodal".
Por tanto, es un documento para el discernimiento
"durante" la Asamblea General, pero al mismo tiempo una preparación
"con vistas" a la asamblea para los participantes y los grupos
sinodales: "La finalidad del proceso sinodal – se especifica – no es
producir documentos, sino abrir horizontes de esperanza".
Dos secciones
El Instrumentum laboris – presentado
hoy en la Sala de Prensa del Vaticano – consta de un texto y quince fichas que
aportan una visión dinámica del concepto mismo de "sinodalidad".
Más en detalle, hay dos
"macro-secciones": la Sección A, que destaca la experiencia de los
dos últimos años y el camino a seguir para llegar a ser cada vez más Iglesia
sinodal; la Sección B – titulada Comunión, misión, participación – que destaca
las "tres prioridades", en el centro del trabajo en octubre de 2023,
vinculadas a los tres temas principales:
Crecer en la comunión acogiendo a todos, sin
excluir a nadie; reconocer y valorar la contribución de cada bautizado con
vistas a la misión; identificar estructuras y dinámicas de gobierno a través de
las cuales articular la participación y la autoridad a lo largo del tiempo en
una Iglesia sinodal misionera.
En este contexto está enraizado "el deseo
de una Iglesia cada vez más sinodal también en sus instituciones, estructuras y
procedimientos". Una Iglesia sinodal que sea ante todo una "Iglesia
de la escucha" y que, por tanto, "desee ser humilde, y sepa que debe
pedir perdón y que tiene mucho que aprender".
"El rostro de la Iglesia muestra hoy los
signos de graves crisis de confianza y credibilidad", se lee en el Instrumentum
laboris.
“En muchos contextos, las crisis relacionadas
con abusos sexuales, económicos, de poder y de conciencia han empujado a la
Iglesia a un exigente examen de conciencia ‘para que, bajo la acción del
Espíritu Santo, no cese de renovarse’ (LG 9), en un camino de arrepentimiento y
conversión que abra caminos de reconciliación, sanación y justicia”
La riqueza de las Iglesias locales
Una Iglesia sinodal es también "una
Iglesia de encuentro y diálogo" con creyentes de otras religiones y otras
culturas y sociedades. Es una Iglesia que "no teme la variedad", sino
que "la valora sin forzarla a la uniformidad". Sinodal es entonces la
Iglesia que se alimenta sin cesar del misterio que celebra en la liturgia,
durante la cual "experimenta cada día la unidad radical en la misma
oración", pero en la "diversidad" de lenguas y ritos.
La cuestión de la autoridad
Otros pasajes significativos se refieren a la
cuestión de la autoridad "¿Se plantea ésta en la línea de los parámetros
derivados del mundo, o en la del servicio”, es una de las preguntas. O la
necesidad de una "formación integral, inicial y permanente" para el
Pueblo de Dios; el "esfuerzo" por la renovación del lenguaje
utilizado en la liturgia, la predicación, la catequesis, el arte sacro, así
como en todas las formas de comunicación a los fieles y a la opinión pública
también a través de los nuevos y viejos medios.
"La renovación del lenguaje – afirma el
texto – debe orientarse a hacerlos accesibles y atractivos a los hombres y
mujeres de nuestro tiempo, sin representar un obstáculo que mantenga
alejados".
Salvatore Cernuzio – Ciudad del Vaticano
Vatican News