El precepto de la Misa dominical es esencial en la vida de todo católico, pero resulta aún más provechoso participar en la Eucaristía de manera cotidiana, como lo han hecho a lo largo de la historia muchos grandes santos.
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Imagen referencial. Crédito: Kenny Eliason / Unsplash. |
El sacerdote recordó las palabras de San Bernardo de
Claraval para definir el valor de la Misa: “ganarás más con una sola Misa que
distribuyendo todos tus bienes a los pobres o haciendo peregrinaciones a todos
los santuarios más sagrados de la cristiandad”.
A
continuación, 5 razones que propone el P. Pittam para asistir a Misa
diariamente:
1.- Crecer en la fe
El
P. Pittam indicó que es cierto que es importante ir a la Eucaristía el domingo,
pero la Misa diaria “es un testimonio silencioso de la necesidad de tener una
fe que se extiende toda la semana y en toda nuestra vida”.
“Solo
con la Misa los fines de semana estamos reforzando la idea de que solo es
posible ser católicos de domingo. La dimensión espiritual de todo eso no debe
ser subestimada”, advirtió.
2.- Es el corazón de la
parroquia y la Iglesia
El
P. Pittam señaló que la Misa diaria es “como el latido del corazón de la vida
de la parroquia” y los que asisten, aunque sean pocos,“son los que hacen que la
Iglesia siga adelante”.
El
sacerdote puso como ejemplo su propia parroquia donde los que asisten
diariamente a Misa son “las personas que yo puedo llamar si necesito hacer
algo”.
“Ellos
son los que limpian la iglesia, dirigen el programa de catequesis, organizan
los eventos y manejan las finanzas. Ellos también son los que mantienen la
iglesia con su aporte económico y su apoyo”, refiere.
3.- Sostiene a la comunidad
La
Misa diaria también tiene un rol importante en la comunidad parroquial porque,
según el P. Pittam, esta une a los fieles.
Incluso
en los momentos de oración antes y después de la Eucaristía como el rezo de las
laudes o la adoración al Santísimo Sacramento.
Además,
“la Misa diaria los ha sostenido y ayudado a crecer en su fe. La Misa diaria
también les ayudó a desarrollar su relación con la comunidad”, expresó.
Aunque
vaya la mitad de la feligresía a Misa diaria, para el presbítero “ellos
proveerán de un firme fundamento de oración en el cual la vida de la comunidad
se construye”.
“Estas
celebraciones silenciosas y modestas son un tesoro que nos arriesgamos a perder
en el detrimento de toda la vida de la parroquia”, subrayó.
4.- Es un gesto de acogida
en momentos difíciles
El
P. Pittam indicó que la gente comienza a ir a Misa todos los días cuando
atraviesan tiempos de crisis como un dolor o una pérdida de un ser querido.
Recordó que una mujer comenzó a ir a Misa diariamente tras la muerte de su
padre.
“Ella
no era una feligresa durante la semana pero empezó a venir porque sabía que
estábamos ahí y que en su momento de necesidad Jesús estaría presente a través
del sacramento”, contó.
“Hay
algo en la Misa diaria que dice que la Iglesia está disponible para la gente.
Por ello tiene consecuencias misioneras”, expresó.
5.- Forma a futuros líderes
El
sacerdote señaló que la Misa diaria ha sido parte de la formación de muchos
líderes de parroquias y de hacedores.
“¿Qué
reemplaza esta oportunidad en las parroquias si ya no hay una celebración
diaria o que se comparte en varios centros?”, preguntó.
Por María
Ximena Rondón
Fuente: ACI