Que el aborto "repugna" a los médicos no es una exageración
Ningún médico de la sanidad pública quiere practicar abortos en Castilla-La Mancha: todos han objetado |
Pronto se cumplirán 40 años de la legalización del aborto en
España y sigue siendo una práctica lejos de estar normalizada. De hecho repugna a casi todos los
médicos, siendo una casta muy reducida de sanitarios la que se dedica a
ello de manera exclusiva en centros privados.
En 2023, cuando un hospital público busca a un médico abortista,
le sigue resultando complejo encontrarlo. Cada vez es más evidente que
prácticamente no hay sanitarios que quieran, por vocación, realizar este oscuro procedimiento que
no es considerado una práctica médica ni por los propios sanitarios.
Es algo que se ha vuelto a poner de manifiesto con unas recientes
declaraciones de la portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, cuando
reconoció que su autonomía no
dispone ahora de médicos en la sanidad pública que quieran realizar
abortos.
Sin abortos ni abortistas en
la sanidad pública
"Esta es la realidad. Si tuviéramos en estos momentos
ginecólogos que estuvieran dispuestos [a practicar abortos], prestaríamos este
servicio, que es uno de
nuestros objetivos", declaró la
también consejera de Igualdad de Castilla-La Mancha en una rueda de prensa este
miércoles.
Fernández no concretó el número de médicos objetores al aborto en
la comunidad. Lo cierto es que ningún médico de la sanidad pública en Castilla-La Mancha
practica abortos, pues, de tenerlos, no habría reiterado la histórica
intención del gobierno socialista de "captar" a profesionales al
margen del Sescam para cometer abortos.
"No hay profesionales de la medicina, como ustedes saben, en
paro precisamente, y menos de la ginecología", justificó.
Según los últimos datos disponibles del aborto referentes a 2021,
recogidos en el Registro Estatal de Interrupciones
Voluntarias del Embarazo, en Castilla La Mancha se practicaron
un total de 3.203 abortos,
pero ninguno de ellos tuvo lugar en los más de 200 centros públicos autorizados a
tal efecto, según recoge Diario Sanitario.
El mismo informe también muestra en que el 58% de las residentes a las que se
practicó un aborto no recibió dicha atención médica en su provincia de
residencia.
Fernández también se ha referido a la objeción de conciencia, que
profesan en masa los sanitarios de "la pública" en Castilla-La
Mancha. "Como no podemos obligar a nadie, también estamos en la obligación
y además creemos en ello, en el respeto a la objeción de conciencia y por tanto
respetamos la decisión de los profesionales, de los facultativos",
expresó.
Al no poder garantizar los abortos en la sanidad pública, la
consejera de igualdad destacó que de eso ya se encargan "las clínicas
concertadas" de Castilla-La Mancha, Iris (en Albacete capital) y CIRE (en
Miguelturra, Ciudad Real).
El aborto repugna a los
médicos
Que el aborto "repugna" a los médicos no es una
exageración. No solo lo muestra la ausencia de médicos que quieran hacerlo ante
la exposición de la sanidad pública, sino también destacados médicos de
referencia mundial, como el fallecido Gonzalo Herranz -"el médico repugna de toda
violencia", dijo en referencia al aborto- o Chano Vidán, presidente del Colegio Oficial de Médicos de La
Coruña, cuando dijo que se trata de una práctica que le "repugna".
De hecho, se trata de una práctica realizada por una casta minoritaria y especializada,
por lo general sin respaldo de otros especialistas en su labor. Del total de
los abortos que se realizan en España, el 84% de los 90.189 abortos quirúrgicos
practicados en España en 2021 tienen lugar en clínicas privadas con las que las
comunidades autónomas tienen conciertos, pese a que el 71% de las informaciones
se solicitaron en centros públicos.
Tanto es así que la patronal del negocio del aborto en España, ACAI, se ve obligada a suavizar la
imagen que se transmite del aborto hasta el punto de hacer publicidad
engañosa del mismo, afirmando que no tiene consecuencias negativas ni riesgos,
hecho que condenó recientemente
el Tribunal Supremo.
Sin "relevo
generacional" de abortistas
En las circunstancias actuales, el rechazo al aborto por parte de
los médicos y ginecólogos ha sido reconocido tácitamente por la misma ACAI al
afirmar que los centros abortistas se encuentran "sin relevo
generacional" de profesionales.
La realidad es
que el médico joven que va a hacer abortos es el que está muy desesperado por
sacar algún dinero y no tiene muchos escrúpulos. A veces son inmigrantes que no
encuentran otra posibilidad, a menudo cubanos, país comunista de aborto
frecuentísimo.
Rezar salva vidas... y cierra
negocios
El desprestigio de la casta abortista o la ausencia de una cantera
que releve a los actuales médicos que lo practican, en su mayoría de edad
avanzada, son solo algunos de las dificultades que enfrentan las clínicas
de abortos privadas.
A ello también se añade la actividad de información y oración por
parte de agrupaciones próvida, lo que según las propias clínicas es altamente
perjudicial para su negocio: no
sólo les quita clientes, sino que desanima a los trabajadores del
sector. “Suma al estigma”, dicen.
Por eso piden que se impida a los grupos provida rezar o
manifestarse cerca de sus centros. Sin embargo, por ahora, en España cualquier grupo puede colocarse a rezar ante
una clínica -o cualquier otro lugar- mientras lo notifique, permita la
circulación, no profiera injurias y calumnias y no supere cierto nivel de
sonoridad.
Grupos de oración silenciosa como 40 Días por la
Vida pueden perjudicar mucho a un negocio abortista. Por el
momento, tienen dos campañas de oración en Castilla-La Mancha, en Albacete y Toledo.
En España todavía se encuentra en fase de expansión. Durante su
última campaña fueron salvadas 8 vidas, pero se desconoce el número de mujeres
que renunciaron a abortar en privado ante la presencia de los fieles en los
abortorios. En Estados Unidos, con años de presencia, los resultados son
más representativos de esta realidad: a nivel mundial fueron salvadas
680 vidas entre el 22 de febrero y el 2 de abril, la directora de
operaciones de la patronal abortista Planned Parenthood California reconoció que la tasa de ausencias de
mujeres a las citas se duplicó en muchas ocasiones y dos abortorios fueron
cerrados, uno en Dallas y otro en Bogotá.
José María Carrera
Fuente: Religión en Libertad