Un obispo y varios sacerdotes católicos se salvaron milagrosamente de morir durante un bombardeo en una catedral de Sudán, gracias a que todos se encontraban rezando ante el Santísimo Sacramento.
En una conferencia de prensa realizada el 24 de abril, el secretario
general de la Conferencia Episcoapl de Sudán (SCBC, por sus siglas en inglés),
P. Peter Suleiman, relató que el Obispo de El-Obeid, Mons. Yunan Tombe Trille
Kuku Andali, y varios de sus sacerdotes no fueron afectados por el impacto de
las bombas arrojadas sobre la catedral de María Reina del África.Foto referencial. Crédito: Shutterstock
“El primer proyectil impactó en la casa cural, mientras que el
segundo cayó frente a la puerta de la catedral, lo que hizo estallar los
vitrales”, relató el sacerdote.
Indicó asimismo que el segundo “golpeó la residencia de los
sacerdotes donde vive el P. Michael Konji, que está enfermo y en cama”. “Damos
gracias a Dios de que no estaba en el cuarto en ese momento, porque esa parte
está completamente dañada”, señaló.
En la rueda de prensa, el P. Suleiman reiteró su agradecimiento
a Dios porque el Obispo de El-Obeid y los sacerdotes están a salvo. Todos
“estaban rezando” frente al Santísimo Sacramento.
El 15 de abril comenzaron los enfrentamientos entre el Ejército
de Sudán y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), luego de semanas
de tensión por la reforma de las fuerzas de seguridad y en el marco de las
negociaciones para formar un nuevo gobierno de transición.
Según informa Efe, los enfrentamientos han dejado al menos 400
muertos y más de 3.500 heridos, y varios países han decidido retirar a sus
diplomáticos y ciudadanos.
Además, los desplazados internos son ya 334 mil, según informó
este martes 2 de mayo un
portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), agencia
de la ONU con sede en Ginebra.
El 22 de abril, las partes en conflicto en Sudán declararon “una
tregua de 72 horas” con motivo de la fiesta musulmana del Ramadán, según
reporta Reuters. El alto el fuego no se mantuvo durante mucho tiempo, ya que
“los combates continuaron en la capital, Jartum”.
Durante la rueda de prensa del 24 de abril, el P. Suleiman
resaltó igualmente que “la Iglesia está sumando su voz a la del resto de la
gente que busca la paz para que las dos partes dejen de luchar y se sienten a
la mesa”.
“Mucha infraestructura ha sido destruida. Se trata de edificios
históricos que dan sentido al país, especialmente los cuarteles y los palacios
presidenciales”, expresó el secretario general del Episcopado que reúne a los
obispos católicos de Sudán y Sudán del Sur.
El P. Suleiman también invitó al pueblo de Dios a “seguir
rezando por el pueblo de Sudán y por el país para poner fin a los combates”.
El 23 de abril, el Papa Francisco renovó su llamado
“para que la violencia cese lo más pronto posible y se retome la vía del
diálogo”. “Invito a todos a rezar por nuestros hermanos y hermanas sudaneses”,
expresó el Santo Padre.
Traducido
y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en ACI África.
Fuente: ACI
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