Una pregunta que santa Teresa de Calcuta hizo en una ocasión a un obispo y que todos podríamos hacernos, sugiere el escritor Claudio de Castro
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Fa Barboza/Unsplash | CC0 |
«Sean constantes en la oración; quédense velando para dar gracias»
Colosenses 4, 2
¿Cuántas horas rezas al día? “Vaya pregunta me haces Claudio” -seguro
pensarás-. “Si
apenas tengo tiempo para trabajar, cuidar de los niños, ayudar en la casa”.
Debes saberlo, sin la oración estamos
perdidos. Así de sencillo. El Padre Pío solía decir que la oración es la
llave que abre el Corazón de Dios.
Imagina la cantidad de gracias que recibes con la oración.
Sabiendo esto es de vital importancia hacer un pequeño examen de conciencia y
preguntarnos si somos constantes en la oración.
Confianza, oración, perseverancia
Un joven dejó este mensaje en las redes sociales: “Fui a ver a
Jesús en el Sagrario. Lloré como un niño ante su presencia y sentí que salía
igual, llorando. ¿Por qué?”
Tres palabras que llegan a mi mente: “confianza”, “oración” y
“perseverancia”.
La oración, la confianza y
la perseverancia forman parte de mi vida diaria. A mí me gusta mucho hacer
el ofrecimientos de obras cada mañana.
«Señor, te ofrezco todo o que haga en
este día, por el bien de mi alma y de los pobres pecadores. Te pido que
conviertas mi trabajo en una oración grata a ti».
Sé que por tantas ocupaciones no podré dedicar el tiempo que me
gustaría a la oración, y permanecer en la presencia de Dios a lo largo del día.
De esta forma puedo trabajar tranquilo sabiendo que todo lo que
haga Dios, por su inmensa bondad lo convertirá en oración.
Todo el día en oración
Es posible de esta forma cumplir este mandato de las Sagradas
Escrituras.
«Oren sin
cesar y den gracias a Dios en toda ocasión; esta es, por voluntad de Dios, su
vocación de cristianos»
II Tesalonicenses 17, 18
Me gusta mucho dedicar tiempo a la oración antes de sentarme a
escribirte estos artículos. Pido a Dios que me ayude, me ilumine y me permita
escribir las palabras que a Él le agraden. Piénsalo…
«Entonces, ya
sea que coman, que beban, o que hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la
gloria de Dios»
1 Corintios 10
La importancia de la fe
La Biblia está llenas de versículos que nos hablan de la oración,
la confianza en Dios, la fe y su importancia en nuestras vidas.
«En esto está
la confianza que tenemos en él: en que si le pedimos algo según su voluntad,
nos escucha. Y si sabemos que nos escucha en lo que le pedimos, sabemos que
tenemos conseguido lo que hayamos pedido»
1 Juan 5, 14-15
La pregunta de la Madre Teresa de
Calcuta
Me hicieron llegar para leer una nota bellísima sobre el encuentro
de un arzobispo con la Madre Teresa de Calcuta. Pensó en un largo diálogo entre
la Madre Teresa y él, pero la pregunta fue solo una. Cuenta su historia….
Ella me miró con dos ojos límpidos y
penetrantes. Luego me dijo: “¿Cuántas horas reza por día?”.
Entre tantas preguntas que pensó
recibir de aquella santa mujer ésta lo dejó pasmado. La madre Teresa ante su
mirada de asombro le explicó:
«Hijo mío, sin
Dios somos demasiado pobres para poder ayudar a los pobres. Recuerda: yo soy
sólo una pobre mujer que reza. Rezando, Dios pone en mí su Amor en el corazón y
así puedo amar a los pobres, ¡orando!».
¿Cuánto rezas?
¿Eres sacerdote, obispo,, religiosa, fraile, laico, catequista,
esposa, esposo, taxista, profesor, médico abogado, enfermera…? Ahora te haré a
ti la misma pregunta. Sé sincero al responder.
– ¿Cuántas horas rezas por día?
Esforcémonos en mejorar nuestra relación con el buen Dios, orando
con mayor fervor, confiando, haciendo el bien.
Claudio de
Castro
Fuente: Aleteia