Para comenzar el día con buen pie
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Esta primavera,
que parece más bien verano, llega con un calor inesperado y hasta extraño. Ayer
hacía un día de esos como pesado, que te hacía sentir cansado. Y, comenzar el
día cansada, no me gusta nada.
Así que con
esas llegué al coro, y se lo decía al Señor, como pidiéndole que enderezara el
día: “Bueno, a ver qué día tenemos hoy”.
De pronto me
vino la imagen de María Magdalena, cuando muy de mañana salió corriendo al
sepulcro para realizar lo que no había podido hacer en Sabbat. Ella se
levantaría apesadumbrada y, sin embargo, era el día más luminoso de la historia
de la humanidad, solo que ella todavía no lo veía. Pero, poco después, su
encuentro con el Resucitado hizo que todo cambiara en ella.
¡Qué gran
verdad! Cuántas veces nuestra propia debilidad nos condiciona para no ver la
realidad en su esplendor… Él, con aquella imagen que tanto me gusta, me mostró
qué necesario es relativizarse mucho uno a sí mismo.
Y por otro
lado, vi claro que lo que da Luz a cada uno de nuestros días es ese encuentro
con el Resucitado. Es Él quien llena de Vida cada instante del día, por eso,
estemos como estemos, lo mejor que podemos hacer es comenzar el día como María,
saliendo corriendo a Su encuentro, que ya se encargará Él de abrir nuestros
ojos a la alegría de la salvación.
Hoy el reto del
amor es acudir corriendo a Su encuentro. Para Él nada es imposible, porque Él
ha vencido hasta la muerte, por lo que también todo lo tuyo queda redimido en
Él. Hoy, para comenzar el día con buen pie, corre hacia Él como María Magdalena,
y Él mismo te enviará a vivir tu día con la alegría que transmite quien se ha
dejado encontrar por Él.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
23 mayo 2022
Fuente:
Dominicas de Lerma
