Caritas Internationalis nació como "la mano solidaria y amorosa" de la Iglesia para servir y promover a la persona humana y, en particular, a los pobres, los marginados y los más vulnerables de la sociedad
Aloysius John, secretario general de Caritas Internationalis |
El 12 de diciembre, Caritas Internationalis (CI) celebrará el 70º
aniversario de su fundación. Su secretario general, Aloysius John, habla con
los medios de comunicación del Vaticano sobre la importancia de este
aniversario y los retos más urgentes para la Confederación Caritas, en tiempos
de pandemia.
Atender las necesidades
humanitarias que surgieron al final de la Segunda Guerra Mundial y prestar
asistencia a las víctimas del conflicto. Cuando Pío XII la creó, el 12 de
diciembre de 1951, estos eran los principales objetivos de Caritas
Internationalis. Una confederación de organizaciones nacionales de Caritas que
ha pasado de las 13 iniciales a las 162 actuales. Además, a lo largo de estos
70 años, CI ha ampliado cada vez más su radio de acción y multiplicado sus
sectores de intervención. En el centro, hoy como al principio, está el
testimonio concreto de la caridad para que las personas -sobre todo las más
vulnerables- puedan experimentar el amor misericordioso de Dios. Caritas
Internationalis ha anunciado hoy el programa de eventos e iniciativas que
marcarán este 70º aniversario de su nacimiento. Fue una oportunidad para hablar
con su secretario general, Aloysius John, sobre los retos a los que se
enfrentará Caritas en el futuro, empezando por la crisis humanitaria mundial
provocada por la pandemia.
Pocos años después del final de
la Segunda Guerra Mundial, nació Caritas Internationalis. Setenta años después
de su fundación, ¿cuáles son los valores que sostienen su Confederación hoy
como lo hicieron entonces?
Caritas Internationalis nació
como "la mano solidaria y amorosa" de la Iglesia para servir y
promover a la persona humana y, en particular, a los pobres, los marginados y
los más vulnerables de la sociedad. Durante estos 70 años, nuestra
Confederación se ha guiado por valores fundacionales como la protección de la
dignidad humana, los derechos fundamentales y la justicia social. Estos valores
siempre han sido la base de nuestro trabajo, que ha evolucionado a lo largo de
los años, siguiendo los signos de los tiempos y buscando un desarrollo
constante para servir mejor al prójimo necesitado. En el corazón de nuestra
misión está, y siempre estará, el encuentro con los pobres, como también nos
recordó el papa Francisco en 2019, durante nuestra última Asamblea General.
"No se puede vivir la caridad sin tener relaciones interpersonales con los
pobres", nos dijo, "porque viviendo con los pobres aprendemos a
practicar la caridad con espíritu de pobreza, aprendemos que la caridad es
compartir".
En estos 70 años, Caritas
Internationalis ha estado presente en todas las grandes emergencias
humanitarias. ¿Cuál cree que es el mayor reto al que se enfrenta hoy en día en
un mundo marcado por rápidas y profundas transformaciones?
La labor humanitaria ha cambiado
mucho desde 1951 y hoy nos enfrentamos a crisis complejas y duraderas, tanto
naturales como de origen humano. Las divisiones políticas, las guerras y los
conflictos religiosos, se mezclan con los efectos del cambio climático, lo que
provoca un aumento espectacular de los refugiados y desplazados internos.
También nos enfrentamos a graves desigualdades y a la aparición de nuevas
formas de pobreza y vulnerabilidad. Mientras seguimos sirviendo y acompañando a
los afectados por ese sufrimiento, nos enfrentamos al reto de fomentar en
nuestra sociedad moderna un sentimiento de solidaridad con ellos. Por otro
lado, el reto más urgente, ante el inmenso sufrimiento humano, es movilizar los
recursos necesarios para llevar a cabo nuestra misión.
La COVID-19 también ha supuesto
una carga para las actividades benéficas y humanitarias. ¿Cómo ha afrontado
Caritas Internationalis la crisis y cómo se está preparando para el periodo
post-pandémico?
Nuestra Confederación se enfrentó
a una crisis sin precedentes, en la que casi todas las Caritas del mundo se
comprometieron a responder a la pandemia. Una señal concreta de apoyo y
esperanza vino del Santo Padre, que quiso incluir a Caritas Internationalis en
la Comisión Vaticana COVID-19. A instancias del Papa, y en colaboración con el
Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, creamos un fondo
para apoyar 40 proyectos de Caritas. Este gesto de solidaridad ha motivado a
otros agentes locales a unirse a Caritas para ofrecer su apoyo. En Bangladesh,
por ejemplo, los propietarios de restaurantes musulmanes apoyaron a la
organización local Caritas, donando alimentos para los refugiados. La respuesta
inmediata a la emergencia fue acompañada inmediatamente por una reflexión sobre
el futuro. Impulsados por la invitación de papa Francisco a "pensar en el
nuevo futuro" de la post-pandemia, hemos creado un grupo de reflexión y
estamos reflexionando sobre cómo el trabajo de Caritas se verá afectado por la
nueva realidad.
La Iglesia está comprometida
globalmente en el proceso sinodal deseado e iniciado por el Papa Francisco.
¿Cuál es la contribución que una realidad eclesial mundial como Caritas
Internationalis puede ofrecer al mismo?
El Papa Francisco destacó que el
proceso sinodal, que implica a toda la Iglesia, tiene como primer punto la
escucha. La capacidad de imaginar un nuevo futuro para la Iglesia depende, por
tanto, en gran medida, precisamente de iniciar un proceso de escucha, diálogo y
discernimiento comunitario. Por lo tanto, Caritas Internationalis puede ayudar
a reflexionar en las comunidades cristianas de base y en las parroquias, ante
todo promoviendo el diálogo y la solidaridad con los más vulnerables dentro de
ellas.
Un aniversario es una ocasión
para hacer balance, pero también para relanzar. ¿En qué se centrará Caritas
Internationalis en los próximos años? ¿Hay alguna campaña en particular que se
lance con motivo de este aniversario?
Esta pandemia nos ha demostrado
que, sin el cuidado de la humanidad y la creación, todos seremos cada vez más
vulnerables. Hoy el mundo necesita más que nunca una conversión radical de
corazones y mentes y una reconciliación con la Creación. Al llevar a cabo
nuestra labor caritativa, estamos especialmente comprometidos con la promoción
de una civilización de amor y cuidado de la humanidad y de nuestra Casa Común.
En estos puntos se basará nuestra Campaña Mundial, que lanzaremos con motivo de
nuestro aniversario y que se prolongará hasta 2024.
Alessandro Gisotti - Ciudad del
Vaticano
Vatican News