Representantes de la Plataforma Más Plurales pidieron una reunión urgente con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, “para abordar la ley Celaá”
La Plataforma Más Plurales, de la que forman parte sindicatos, asociaciones de
familias, empresas del sector y diferentes organizaciones educativas, registró
el pasado 30 de noviembre en el Palacio de la Moncloa un escrito en el que
solicitan una reunión urgente con el presidente del Gobierno.
“Nos parece muy bien que se refuerce el papel de la [escuela]
pública, pero pensamos que no es necesario que para ello haya que excluir a la
enseñanza concertada”, precisan.
Además, advierte que la Ley anuncia “la progresiva desaparición de
los centros de Educación Especial, desprecia al profesorado de la Enseñanza
Concertada y convierte a la asignatura de Religión en una asignatura marginal y
decorativa”.
Esta reunión solicitada con el presidente del Gobierno tiene como fin “exponer
al Presidente los puntos de vista educativos que defiende la Plataforma, que
solo buscan mejorar la calidad de la educación de nuestro país”.
Ya que, según precisan, “en vez de abordar asuntos tan importantes
como la homologación de todos los trabajadores de los centros sostenidos con
fondos públicos, el fracaso escolar, la igualdad educativa, la mejora de
oportunidades y el descenso del nivel de los alumnos españoles, la LOMLOE se
centra en transformar de manera radical asuntos nada problemáticos que están
funcionando bien en nuestro país, como son el desarrollo de la
complementariedad de los modelos educativos y el respeto a las libertades
democráticas recogidas en la Constitución”.
También muestran su sorpresa y desconcierto ante “las prisas con
la que se está tramitando la Ley y piensa que todavía se está a tiempo, con
espíritu de consenso, de alcanzar acuerdos que mejoren el contenido de una Ley
que ha provocado un unánime rechazo en la sociedad española”.
“En Más Plurales estamos firmemente convencidos de que en el
sistema educativo todos somos necesarios para contribuir a la formación de
nuestros alumnos y, desde la convivencia y el respeto a la pluralidad y
libertad, avanzar en la mejora de nuestra sociedad civil”, aseguran.
Por eso recuerdan que casi 2 millones de ciudadanos se han unido a
la recogida de firmas lanzada por la Plataforma contra la Ley Celaá y subrayan
que defienden “la convivencia armónica de las redes pública, concertada y
privada, solicitamos al presidente del Gobierno la paralización de la LOMLOE y
que se abra un periodo de debate y de participación para alcanzar un consenso
que demanda la sociedad española sobre las cuestiones educativas”.
La Plataforma Más Plurales organizó el domingo 22 de noviembre más
de 50 manifestaciones en toda España para protestar contra la Ley Celaá. Una
ley, que según precisan, “en ningún momento ha buscado el consenso y que se ha
tramitado de manera exprés, en plena pandemia, impidiendo la participación de
la comunidad educativa”.
Ley Celaá
La LOMLOE es la Ley Orgánica de Mejora de la Ley Orgánica de
Educación, también conocida como Ley Celaá en referencia a la Ministra de
Educación del actual gobierno socialista de España. Ésta pretende derogar la
LOMCE (Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa aprobada por el Gobierno
de Mariano Rajoy (2016- 2018), una ley educativa que está actualmente en vigor
pero que desde el PSOE quieren modificar alegando que fue aprobada sin
consenso.
La Ley Celaá, elaborada por PSOE y Podemos inició su trámite durante el periodo
de estado de alarma por la pandemia de COVID, sin oír el parecer de la
comunidad educativa y, por supuesto, sin consenso. Hoy fue aprobada por el
apoyo que recibieron de los partidos independentistas catalanes y vascos.
Más Plurales ha reunido, hasta el momento, más de 1.5 millones de
firmas contra la aprobación de la Ley Celaá, ya que alegan que en esta nueva
ley educativa es “la imposición de un modelo de educación único, estatal y
laico que pondrá fin a la pluralidad educativa actual”.
De esta manera, apuntan que “será el Estado” y no los padres
“quien decida la educación que han de recibir los hijos” y en este modelo
educativo no habrá espacio “para la educación concertada. Miles de colegios
cerrarán en los próximos años. Ni para la asignatura de religión, que vuelve a
ser postergada. Ni, por supuesto, para la educación especial, la cual pese al
clamor de los padres afectados, también desaparecerá”.
Un modelo “fuertemente intervencionista que promueve la
restricción de derechos y libertades ciudadanas y atenta contra la pluralidad
de nuestro sistema educativo que es clave en una sociedad democrática”.
Plataforma Más Plurales
Más Plurales integra a más de 260 mil profesionales, docentes y no
docentes que ven peligrar la continuidad de sus centros y sus puestos de
trabajo; cerca de 4 millones de familias a la que se les limita el derecho a
elegir el tipo de educación que quieren o mejor se adecúa a las necesidades de
sus hijos; más de 3 millones de alumnos que eligen voluntariamente, en centros
de titularidad pública y privada, cursar la asignatura de Religión; así como
más de 9.300 centros de la red concertada y privada que ven peligrar la
continuidad de sus proyectos educativos.
Fuente: ACI Prensa