¿QUIÉN CREES TÚ QUE SON LOS MÁS SABIOS DE ESTE MUNDO? ¿LOS DEL PREMIO
NOBEL?
Sin duda ellos y similares, lo son. Pero
esa sabiduría humana queda pobre, si va sin la virtud de la prudencia. A la
sabiduría humana "a secas", le faltaría el ingrediente que no
tuvieron -así las llama el Evangelio- las vírgenes necias. ¡Qué pena: no
pudieron entrar en el cielo! ¿Por qué? Mira este vídeo.
P. EVARISTO DE VICENTE