Esta
no es la primera vez que el Cristo Redentor es iluminado en homenaje a las
personas que luchan contra la enfermedad y a las víctimas que ha dejado la
pandemia
Foto: ABC |
El Cristo Redentor de Brasil fue iluminado nuevamente, esta
vez en homenaje a todas las personas que han fallecido a causa de la pandemia
de coronavirus y en agradecimiento a los trabajadores que brindan los servicios
básicos en el país.
Según señala la Universidad Johns Hopkins,
Brasil es el segundo país con más casos de contagio por COVID-19, con más de un
millón de personas afectadas y casi 62 mil muertes a causa de la enfermedad.
La
Conferencia Episcopal Brasileña (CNBB), Cáritas Brasil y la Organización de las
Naciones Unidas (ONU) juntaron esfuerzos para realizar en la noche del 1 de
julio el homenaje “Para Cada Vida”, dedicado a todas las personas que han
fallecido por el virus y darle las gracias a aquellos que arriesgan sus vidas
trabajando en los servicios básicos.
La
imagen de Jesús en el cerro Corcovado de Río de Janeiro se iluminó con las
cifras de los fallecidos en Brasil y alrededor del mundo a causa del
coronavirus, junto con la frase “no existe ninguno a quien nadie extrañe”.
Luego se proyectó las palabras “Para cada
vida, nuestra gratitud”, que fueron acompañadas de imágenes de personas
realizando su labor en hospitales, mercados, entre otros.
Finalmente,
se mostraron algunos nombres de aquellos que han fallecido por la enfermedad
junto con la frase “Todos unidos para cada vida” en diferentes idiomas.
Previo
a la proyección, se celebró la Santa Misa en honor a los fallecidos por la
enfermedad, la cual fue presidida por el Arzobispo de Río de Janeiro, Cardenal
Orani João Tempesta.
El
Purpurado alentó a los fieles a poner el dolor y la esperanza en las manos de
Dios y señaló que “precisamente en ese altar, que es Cristo Redentor, queremos
ubicar a todas las personas de todo el mundo que se han ido, para que puedan
ser recibidas en la casa del Padre”.
“Cuando
rezamos a Dios por el descanso eterno de aquellos que partieron en el mundo
entero, reeducamos el sentido más profundo y amplio de vivir en la hermandad
del amor, de darnos unos a otros, de la importancia de que cada persona sea
digna de atención, afecto y preocupación, independientemente de la raza, el
estado social o las creencias personales”, agregó.
El
Cardenal Tempesta animó a orar por las familias de las personas fallecidas por
COVID-19, “para que podamos continuar en busca del bien y la paz”.
Esta no es la primera vez que el Cristo
Redentor es iluminado en homenaje a las personas que luchan contra la
enfermedad y a las víctimas que ha dejado la pandemia.
El 18 de marzo las banderas de los 166
países afectados por la crisis sanitaria fueron proyectadas en la emblemática
imagen, en un evento de oración, en el que solo participó la prensa para evitar
aglomeraciones.
El Domingo de Resurrección, 12 de abril, el
Cristo Redentor fue “vestido” con el uniforme de los médicos del país, como un
homenaje al personal de salud que lucha para detener al coronavirus.
La imagen de Jesús se iluminó con una bata
de médico, junto con la palabra “Gracias” en diferentes idiomas, como un
homenaje a las personas que arriesgan su vida en los hospitales.
Fuente:
ACI