HOY EL RETO DEL AMOR ES SONREÍR A DIEZ PERSONAS DESCONOCIDAS

Galletas felices

Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

Estábamos desayunando y, como es costumbre, la procuradora pasó con la bandeja de galletas para que cada una se sirva.

Ayer en la bandeja había pequeños paquetes de dos galletas. Cogí uno y le dejé en la mesa. Mi sorpresa fue que, al mirarle, descubrí que las galletas tenían forma de tortuga y de estrella; pero, lo que me llenó de alegría es que los dibujos estaban sonriendo. Eran unas galletas felices, y no solo eso, sino que me cambiaron el día.

Su sonrisa dibujada en la galleta hizo que cambiara mi día y lo empezara a ver más optimista.

Cuando sonríes, tu cerebro interpreta que estás contento, y todo tu ser empieza a verlo todo bueno.

Pero lo que me di cuenta es que estaba sonriendo con la galleta, y fue contagioso, porque, al levantar la cabeza y ver a las monjas de enfrente, estaban sonriendo al verme.

San Pablo nos lo dice muy claro: “Estad siempre alegres, os lo repito, estad alegres”. Porque la alegría es uno de los signos del cristiano.

Jesús siempre estaba alegre, siempre buscaba lo bueno de todo, y a sus discípulos les decía que fueran felices, que “no ayunasen mientras el novio está con ellos”.

Jesús con su sonrisa mostraba confianza. Y es verdad que hoy en día el arma del cristiano es el amor, no es la palabra; se nos tiene que notar que somos cristianos por nuestra forma de comportarnos, y una de ellas es la alegría. Porque a una persona seria y brusca nos cuesta acercarnos, pero a una persona feliz todo el mundo se arrima.

Hoy el reto del amor es sonreír a diez personas desconocidas; verás cómo te devuelven la sonrisa y, si te va bien, hazlo con más gente. Hoy es un día para ser una galleta feliz. Porque Cristo te ama.

VIVE DE CRISTO

Fuente: Dominicas de Lerma