PARÁBOLAS DE CONVERSIÓN Y PERDÓN: LA OVEJA DESCARRIADA

Una fiesta en el cielo y en la tierra
Dominio público
Lucas. 15, 3-7

La conclusión de la parábola es una fuente de esperanza para el pecador arrepentido.

Jesús nos quiere decir que la conversión de un solo hombre a Dios es algo muy grande y valioso.

Podemos decir en un lenguaje figurado que esta conversión implica “una fiesta en el cielo”. Hay un regocijo espiritual por una conversión. Aunque es una frase antropomórfica, nos ilumina cómo la bondad y el amor de Dios se pueden manifestar al modo humano de alegría como fue la del padre del hijo prodigo. 

Hay una fiesta en la tierra desde el punto de vista de que nosotros también nos alegramos de que una persona recobre la paz espiritual y vuelva al buen camino.

A veces dudamos de los buenos propósitos de una persona que quiera iniciar su camino de retorno al Señor. Sin embargo aunque nos cueste trabajo creerlo, deberíamos alegrarnos y sentir el regocijo de quienes recuperan un amigo, de añadir un puesto más en la mesa para compartir el pan. Es el momento de animar al hermano, de comprometerlo más, de apoyarlo y caminar con él.

Examinemos nuestras actitudes al respecto.

A veces pensamos que esta parábola no es para nosotros, pero fue dicha para todos. Cada uno de nosotros debe dejarse encontrar por el Buen Pastor, dejarse recoger por él para que nos lleve al redil y cada uno de nosotros puede, con su conversión a Dios, provocar una fiesta en el cielo.

Lucas. 15, 3-7

Jesús les dijo esta parábola: «¿Quién de vosotros que tiene cien ovejas y pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto y va tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, se la carga sobre los hombros, muy contento;  y, al llegar a casa, reúne a los amigos y a los vecinos, y les dice: “¡Alegraos conmigo!, he encontrado la oveja que se me había perdido”. Os digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse.
 Fuente: ACI