Elecciones legítimas y libres y un canal humanitario, caminos para la
recuperación
Los Obispos de Venezuela en una Exhortación titulada
«Dios consolará a su pueblo» (Isaías 49, 13) lamentan «las graves y tristes
situaciones que dibujan un panorama negativo y desolador»
Se hacen eco de las palabras del Papa Francisco ante
el Cuerpo Diplomático ante la Santa Sede (8 de enero de 2018):
«Pienso especialmente en la querida Venezuela, que
está atravesando una crisis política y humanitaria, cada vez más dramática y
sin precedentes...»
Totalitarismo, aumento de la pobreza, éxodo de
venezolanos, doloroso naufragio de una embarcación
El documento episcopal destaca la «realidad de
tragedia y sufrimiento», así como la corrupción y políticas que insuficientes,
que «han dado como resultado aumento de la pobreza, desempleo, carencia de
bienes básicos, descontento y desesperanza general».
«El éxodo de millones de venezolanos que buscan nuevos
horizontes nos duele profundamente, así como las fórmulas desesperadas para
huir del país», escriben los prelados de Venezuela. Con su profundo pesar ante
«el drama reciente del naufragio de una embarcación con un número importante de
venezolanos que concluyó con la trágica muerte de un grupo significativo de
ellos».
Como ya han advertido, los Obispos venezolanos
reiteran que: "La raíz de los problemas (del país) está en la
implantación de un proyecto político totalitario, empobrecedor, rentista y
centralizado que el gobierno se empeña en mantener" (CEV, "El
Señor ama el que busca la justicia", 12-07-2016).
Tras afirmar que «la Asamblea Nacional Constituyente
es inconstitucional e ilegítima en su origen y en su desempeño», la Exhortación
se refiere también a la ley que «criminaliza toda manifestación en su contra y
propicia la multiplicación y difusión de toda clase de rumores y
especulaciones, cuyo efecto es consolidar un control absoluto de actividades y
provocar el miedo y la autocensura».
Haciendo hincapié en que «con la suspensión del
referéndum revocatorio y la creación de la Asamblea Nacional Constituyente, el
Gobierno usurpó al pueblo su poder originario» y recordando «las dificultades
de entendimiento cada vez más graves entre el gobierno y la oposición política,
a falta de un punto de apoyo común que se respete en la realidad, como debería
ser la Constitución vigente», los Obispos venezolanos advierte que el «Consejo
Nacional Electoral».
Despertar y reaccionar
Poniendo en guardia contra dos actitudes: la
conformista y la resignada, la Exhortación señala que Lo positivo y eficaz es
el compromiso, la esperanza y la solidaridad: «¡Despierta y reacciona, es el
momento!, lema de la segunda visita de san Juan Pablo II a Venezuela (1996),
resuena en esta hora aciaga de la vida nacional. Despertar y reaccionar es
percatarse de que el poder del pueblo supera cualquier otro poder».
El gobierno permita un canal humanitario
Destacan que «la emergencia económica y social hace
indispensable que el Gobierno permita un Canal Humanitario», y que «la
desnutrición ha sido verificada científicamente, las muertes por inanición
conmueven, las protestas por el hambre cunden en todo el país».
Con la acción concreta de las diócesis, parroquias,
Caritas y otras instituciones y las ONG que están haciendo lo posible, para
ayudar con alimento y medicinas a quienes los necesiten, recuerdan que «por
sensibilidad humana abogan por el derecho de los más necesitados. Además, por
nuestra condición de cristianos, el amor de Cristo nos urge a socorrer al
prójimo (cf. 2 Co 5, 14)».
En esta dirección se desarrollará la próxima Campaña
Compartir durante la Cuaresma.
Ante el fracaso del gobierno los obispos piden un
cronograma electoral
«Venezuela necesita un cambio de rumbo. El Ejecutivo
ha fracasado en su tarea de garantizar el bienestar de la población: ni los
servicios públicos, ni la industria petrolera, ni los cuerpos de seguridad, ni
la sanidad pública, ni otros organismos han sabido responder a las necesidades
de la gente. Las elecciones son el medio democrático para lograr ese cambio de
rumbo. Exigimos la publicación de un cronograma electoral».
Democracia, derechos humanos, detenidos, exiliados, se
investiguen denuncias de torturas
«La libertad es un derecho humano inalienable, no
negociable, y una exigencia de la democracia». Los Obispos de Venezuela
manifiestan su «solidaridad con los centenares de presos políticos, exiliados y
detenidos por cualquier causa, muchos en situaciones infrahumanas, enfermos,
privados de visitas familiares, a los cuales se les niega el derecho a un
debido proceso. Deben gozar de libertad plena. Los organismos del Estado tienen
que investigar las denuncias sobre las torturas y castigar a los responsables
según las leyes».
Condiciones necesarias para el diálogo
«Condiciones distintas de las que hasta ahora se han
establecido. Es indispensable un reconocimiento y respeto institucional. Toda
negociación ha de fundamentarse en la integridad de los negociadores, en
objetivos claros y en una agenda preestablecida y conocida, para que pueda
gozar de la confianza y credibilidad de la población».
La Virgen de Coromoto acompaña a su pueblo que anhela
libertad justicia y paz
«La Virgen María acompaña nuestro sufrimiento. Ella
peregrina con nosotros en esta hora de nuestra historia. En el rostro indígena
de nuestra Madre de Coromoto vemos reflejado el sufrimiento, los trabajos y los
anhelos de nuestro pueblo. En el Niño que ella nos entrega descubrimos la
cercanía de Dios y su infinito amor, que nos garantiza el destino glorioso del
pueblo en libertad, justicia y paz».
Cecilia de Malak – Ciudad del Vaticano
Vatican News