Nick
y Carrie dejan la resoluciĆ³n del caso en manos de Dios y piden oraciones
En
abril, a Carrie DeKlyen, madre de cinco hijos, le diagnosticaron un
glioblastoma multiforme, forma de tumor cerebral en su caso muy agresivo. Dos
semanas despuƩs ella y su esposo Nick, que viven en Wisconsin, supieron que
esperaban un sexto hijo, una niƱa.
Los
mƩdicos de la Universidad de Michigan practicaron dos intervenciones
quirĆŗrgicas a Carrie, pero el cĆ”ncer volviĆ³. Le propusieron entonces un
tratamiento clĆnico para prolongar su vida (15 meses de media con su
patologĆa), pero ello implicarĆa abortar a su hijo. Carrie y Nick se negaron.
“Somos
una familia de fe”, explica a Wood TV la cuƱada de Carrie,
Sonya Nelson, “asĆ que creemos que el plan de Dios para Carrie es
curarla. Tanto si Ćl elige curarla aquĆ como en el cielo, confiamos en
Ćl“.
El
actual objetivo es que Carrie, que en algunos momentos estĆ” inconsciente, viva
ocho semanas mƔs para que su hijo alcance la edad de 28 semanas y pueda nacer
prematuramente.
Y la
familia pide oraciones para que, llegado ese momento, ella pueda ver a su niƱa
antes de morir: “Nos gustarĆa que fuese capaz de contemplar el regalo que
ha hecho. Ella le dio a esta niƱa el regalo de la vida”.
Los
DeKlyen son miembros de una comunidad protestante que les ayuda en el cuidado
de los hijos, pues Nick estĆ” todo el tiempo posible en el hospital, y piden
oraciones y ayuda econĆ³mica desde un perfil creado en Facebook para informar
sobre la evoluciĆ³n de Carrie y de su niƱa, que crece en su seno con total
normalidad.
ArtĆculo publicado originalmente por
ReligiĆ³n en Libertad
Fuente: Aleteia