¿Cuál
es la verdadera «gran fuerza de la Iglesia» universal? «Las pequeñas iglesias
perseguidas». Palabra de Papa Francisco
El Pontífice recuerda a menudo que hay
más mártires cristianos en la actualidad que durante los primeros siglos, pero,
denuncia, «los medios de comunicación no lo dicen», porque no es noticia.
Más
allá de la comparación con el pasado, lo que surge de las fuentes vaticanas es
que en 38 países se verifican violaciones contra la libertad religiosa. De
estos, 23 son zonas en las que se verifican abusos graves: absoluta negación de
los derechos y de las libertades, detenciones por largos periodos sin un
proceso justo, violaciones y homicidios o incluso experimentos médicos.
Y
los cristianos son el grupo más perseguido. Lo comunicó Ayuda a la Iglesia
Necesitada (AIN), fundación de derecho Pontificio que nació en 1947 para apoyar
a la Iglesia en todo el planeta, con particular atención por las iglesias
perseguidas.
Estudiando
196 naciones, AIN ha medido la “temperatura” de la tranquilidad y de las
posibilidades con las que se puede vivir el propio credo y participar en ritos
de oración. De esta manera ha tomado una “fotografía” que se puede consultar en
el Informe 2016 sobre la libertad religiosa en el mundo. El documento muestra
que los principales responsables de la violación del derecho de practicar la
propia fe no son los gobiernos, sino las diferentes organizaciones militantes y
fundamentalistas.
El
régimen más duro contra los creyentes es Corea del Norte, definida por AIN como
«feroz». Se cree que en los campos de trabajo hay alrededor de 200 mil
prisioneros. Entre ellos hay un número elevado (tal vez el 10%, pero no es
posible precisarlo) de cristianos, detenidos o encarcelados por haber poseído
una Biblia o por haber participado en celebraciones. Hay sacerdotes acusados de
subversión y condenados a trabajos forzados por haber ejercido su actividad
religiosa; hay mujeres condenadas a muerte por haber puesto en circulación la
Sagrada Escritura; a veces, son encerrados también los familiares de los
«culpables» porque existe el delito de culpa por asociación.
Situaciones
particularmente dramáticas se viven en el norte de Irak, en donde son
perseguidos los yazidíes, además de los cristianos, y en Eritrea.
El
Informe, que llega a su XII edición, presenta una nueva categoría de
clasificación, consecuencia de un «nuevo fenómeno de violencia de carácter
religioso»: el «hiperextremismo islámico». Se trata de los hombres del llamado
Estado Islámico de al Baghdadi en la zona de Irak y Siria, de los integrantes
de Boko Haram que pretende descristianizar el norte de Nigeria, de al Shabaab
en Somalia y en ciertas regiones de Kenya. Este peligro difundido amenaza a
todos «porque las víctimas de esta categoría han sido 5 países en el mundo»
durante los últimos años. Entre otras cosas «el extremismo islámico y el
hiperextremismo –indica el Informe– observados en países como Afganistán,
Somalia y Siria, representan un factor clave del masivo incremento del número
de refugiados en el mundo».
En
relación con los cristianos, AIN subraya el peligro de que desaparezcan del
Medio Oriente, además de ser eliminados en algunas regiones de África. Lo
escribe en otra publicación, «Perseguidos y Olvidados. Informe sobre los
cristianos oprimidos por su fe». Desde Medio Oriente hasta Asia, pasando por
África, en 22 estados los cristianos sufren violencias de diferentes
naturalezas. El número de naciones identificadas como lugar de «extrema»
persecución cristiana son diez: China, Eritrea, Irán, Arabia Saudita,
Paquistán, Corea del Norte, Irak, Nigeria, Sudán y Siria.
En
este oscuro escenario también hay algunas «luces»: son los pasos que han dado
países como Egipto, Bhután y Qatar. Pero, para llegar a la plena y pacífica
libertad religiosa, que el cardenal Mauro Piacenza, presidente de AIN, define
«madre de las demás libertades», todavía hay mucho camino por delante.
DOMENICO
AGASSO JR.
CIUDAD
DEL VATICANO
Fuente:
Vatican Insider