Agustín Domingo Moratalla disertó en su ponencia “Valores familiares para
sociedades líquidas" sobre el valor de la familia para la sociedad en la
70 Semana de Misionología afirmando que la "Familia es una brújula para la
sociedad"
La
70 Semana Española de Misionología (SEM) concluyó este jueves con la ponencia
sobre Valores familiares para sociedades líquidas, del profesor Agustín
Domingo Moratalla, profesor de la Universidad de Valencia y director de la
sección UIMP en Valencia, describió “las grietas” de la cultura actual,
una cultura “del deseo y la liquidez” y animó a la familia a desactivar esos
influjos y defender sus valores esenciales.
El
profesor lamentó que “en nuestra sociedad, los deseos se pueden convertir en
derechos y los valores se queden como algo contracultural”. “Aunque la
perspectiva de la familia cristiana misionera es contracultural, hay
muchas grietas morales por las que la familia puede ser subversiva.
No
nos debe preocupar que descienda la «acción cristiana», sino la «pasión
cristiana»”, subrayó. “En una sociedad que te obliga a romper con tus
raíces –añadió Moratalla- debemos recuperar y responder a la pregunta: «¿Quién
necesita de ti?»” y subrayó que "la comunidad cristiana y la sociedad
nos necesitan, porque la familia es una brújula la sociedad"
La
conferencia de clausura estuvo a cargo de Begoña Ladrón de Guevara, presidenta
de la Confederación Nacional de padres de alumnos (COFAPA), quien habló
de “La familia, bien necesario para la sociedad”. En ella afirmó que
la familia educa en valores, aporta valores a una sociedad que está en
constante cambio.
Hizo
hincapié en que la familia debe ser un espacio que genere compromiso y
vida de fe. Y reconoció la gran labor de las familias misioneras y
animó a seguir trabajando en la animación misionera porque la "Misión
es un mundo desconocido para muchos, pero cuando se conoce...¡apasiona!"
En
el acto de clausura Monseñor Pérez, presidente de la Comisión Episcopal de
Misiones (CEM), estuvo acompañado por los obispos de la CEM monseñor Ramón del
Hoyo y monseñor Francisco Cerro, afirmó que "la familia
cristiana es el lugar donde se "revela" que Dios es amor y es la
célula sacramental que nos permite participar en la vida y misión de la
Iglesia”. Y manifestó su profunda "gratitud por el ambiente misionero
ilusionante y esperanzado que se respira en la Iglesia española".
Fuente:
OMP