¿ES BUENO PARA LOS CRISTIANOS PARTICIPAR EN EL CARNAVAL?

Depende del tono y contenidos de la fiesta... divertirse es agradable a Dios, pero sin dañarse con excesos

El carnaval se celebra desde hace milenios en la humanidad. Algunos lo sitúan incluso en el antiguo Egipto, hace 5.000 años. Otros lo sitúan en el Imperio Romano, procedente de las fiestas de Saturno (fiestas de invierno en Roma) y de Baco, el dios del vino, que de ahí viene la palabra “bacanal”, que era una fiesta sin límites.

En los pueblos cristianos, especialmente en la Edad Media en que durante la Cuaresma se vivían ayunos muy rigurosos y penitencias extraordinarias, el Carnaval eran fiestas que se celebraban los tres días anteriores al Miércoles de Ceniza, día en que comienza la Cuaresma. Consistían en comer, beber y bailar mucho.

La palabra Carnaval viene del latín “carne-levare”, es decir eliminar la carne en las casas y los comercios, pues se acercaba la Cuaresma y durante la Edad Media los pueblos cristianos de Europa y Eurasia pasaban los 40 días que dura la Cuaresma, hasta la fiesta de la resurrección de Cristo, sin comer carne.

Al tener que eliminar la carne se hacían grandes comilonas con mucha bebida, acompañadas siempre de disfraces y bailes por las calles, pues el carnaval se vivía y se vive en la calle. Era como recuperar las fiestas paganas de los saturnales (fiestas de invierno) y las bacanales, puestas en un calendario cristiano. Lo festejos duraban los tres días anteriores al inicio de la Cuaresma. Al carnaval se le llama también Carnestolendas.

El carnaval termina en muchos sitios con el “entierro” de la Sardina, el pescado típico de la Cuaresma en la Edad Media.

Mucho se ha discutido de si el carnaval es una fiesta en realidad pagana. La tradición así lo constata, y además en carnavales españoles las comparsas carnavalescas utilizan vestidos y símbolos que ridiculizan la religión cristiana, como disfraces de obispos y papas.

La pregunta que muchos se hacen: ¿Es el carnaval una fiesta cristiana? Sencillamente no, aunque se han aprovechado las fiestas para hacerlas coincidir con el calendario cristiano de Cuaresma y Semana Santa.

El carnaval es una fiesta de origen pagano que se recuperó en la Edad Media y que la Iglesia de Roma toleró, como ha ocurrido en todas las civilizaciones en que había unos días al año dedicados a celebraciones desenfrenadas.

Otros se preguntan, al ser una fiesta pagana: ¿es bueno o malo para un cristiano participar en el carnaval? En principio, participar en un carnaval no tiene nada de malo, aunque todo depende del tono y contenidos de la fiesta.

Para todo cristiano no es bueno comer demasiado, emborracharse o tomar drogas, porque atacan la salud del cuerpo y por lo tanto van contra el quinto mandamiento que obliga a cuidar del propio cuerpo sin exponerlo a lesiones como las que ocasionan lo excesos del alcohol, las drogas o las comilonas.

Eso no quiere decir que dejen de participar en las fiestas, sino que en ellas el cristiano debe demostrar su sobriedad y su templanza. Divertirse es agradable siempre a Dios, pero no es limpia y sana la diversión que daña al propio cuerpo con excesos.

SALVADOR ARAGONÉS


Artículo extraído de Aleteia