El obispo D. César Franco visitó ayer el santuario de la Fuencisla en el
primer acto oficial de su episcopado
El obispo de Segovia, César Franco, inició ayer su actividad pastoral con una
visita al santuario de la Virgen de la Fuencisla, patrona de la ciudad, con la
que quiso expresar no sólo su amor y su devoción a la virgen, sino que comenzó a
estrechar los vínculos de unión con la diócesis a través de uno de los símbolos
más importantes de la fe en la provincia.
A su llegada al santuario, el
obispo fue recibido por el rector, Ángel Miguel Alonso y por el presidente de la
Real Cofradía de Nuestra Señora de la Fuencisla, Julio Borreguero, con quien
departió unos minutos antes de entrar al templo, donde presidió la misa solemne
concelebrada con el rector ante un numeroso público que llenó el santuario pese
al frío y la niebla de una desapacible mañana dominical.
En su homilía,
monseñor Franco manifestó que el objeto de esta primera acción como obispo de la
diócesis es "postrarme a los pies de la virgen para pedir su ayuda en el inicio
del ministerio episcopal", y resaltó la importancia crucial de María en la
historia de la Salvación y en el anuncio del Evangelio, asegurando que Dios
"quiso hacer su casa en María, porque en ella se ha hecho hombre a través de
Jesucristo, y por ello debe ocupar un lugar importantísimo en nuestra fe"
El
obispo pidió a los segovianos que se dirijan a La Fuencisla para pedirle que su
fe "sea más firme y comprometida en una tierra que tiene que reverdecer". En
este sentido, precisó que la devoción a María "no es una medalla o una
estampita, sino decir como hizo ella: he aquí la esclava del Señor". "Si los
cristianos rezáramos como María, el mundo cambiaría, -aseguró- y os pido que
recéis con ella para que la fe reverdezca en nuestras parroquias y comunidades
cristianas y sean más fervorosas y más ricas en frutos".
Al igual que en su
homilía de toma de posesión, César Franco insistió en su preocupación por la
escasez de vocaciones al sacerdocio en la provincia y pidió a las familias que
"hablen a sus hijos del Seminario no con exigencia, sino como la posibilidad de
escuchar la llamada del Señor con generosidad".
Al concluir la Eucaristía, el
obispo visitó el camarín de la virgen acompañado por el rector e integrantes de
la Real Cofradía, donde ante su imagen rezó el "Ángelus" y solicitó una escalera
para poder besar su manto en señal de devoción. A la salida del santuario,
recibió el saludo y la felicitación de muchos de los feligreses que asistieron a
la eucaristía, a quienes correspondió de forma afable y cariñosa.
Trabajo y primeros encuentros.- El obispo de Segovia
comenzará hoy oficialmente su tarea episcopal desde su despacho en el edificio
del Obispado, donde ya tiene previsto recibir las primeras visitas y mantener
algunos encuentros con distintos responsables diocesanos.
La agenda de César
Franco incluye para esta semana un encuentro con los medios de comunicación que
tendrá lugar mañana martes en la Casa de Espiritualidad “San Frutos”, donde el
prelado tendrá la primera toma de contacto con los periodistas locales. Para el día 24, monseñor Franco retomará
la costumbre de su antecesor en el cargo y se trasladará hasta el Centro
Penitenciario para celebrar la Misa de Nochebuena con los reclusos. El sábado
27, festividad de San Juan Apóstol, participará en el tradicional encuentro
navideño con la curia diocesana, que también servirá para conocer a los
sacerdotes con los que trabajará los próximos años.
Fuente: El Adelantado de Segovia
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