LA ÚLTIMA CATEDRAL GÓTICA DE EUROPA ESTÁ EN ESPAÑA Y CUMPLE MEDIO MILENIO

Joya arquitectónica y testimonio del esplendor gótico, celebra medio milenio desde el inicio de su construcción. Erigida en pleno siglo XVI, cuando el Renacimiento ya despuntaba en Europa
Catedral de Segovia. Dominio público

La Catedral de Santa María de Segovia comenzó a levantarse en 1525, cuando el estilo gótico estaba dando paso al renacimiento. Sin embargo, los canónigos segovianos optaron por mantener la tradición y encargar una nueva catedral en clave gótica, después de que la anterior, junto al Alcázar, fuera destruida durante la Guerra de las Comunidades. El resultado fue una obra colosal, de líneas elegantes, grandes ventanales y una esbeltez que le valió el sobrenombre de «la Dama de las Catedrales».

Diseñada por Juan Gil de Hontañón y continuada por su hijo Rodrigo, la catedral de Segovia tardó casi dos siglos en completarse, pero su coherencia estilística ha desafiado el paso del tiempo. Con su ubicación privilegiada en lo alto de la ciudad, ha sido testigo de cinco siglos de historia, desde el esplendor de los Austrias hasta la actualidad. Su torre campanario, que llegó a ser la más alta de España antes de ser rebajada por un rayo en el siglo XVII, sigue siendo un hito del paisaje urbano.

Este 2025 se cumplen cinco siglos del inicio de las obras, y la diócesis, junto al Ayuntamiento y otras instituciones culturales, prepara una programación especial de actos conmemorativos. Visitas nocturnas, exposiciones temporales, conciertos de órgano y jornadas académicas pondrán en valor no solo la belleza artística del templo, sino su papel como faro espiritual y cívico en la historia de Castilla.

Segovia ya es Patrimonio Mundial desde el 6 de diciembre de 1985. En esa fecha, la Ciudad Vieja de Segovia y su Acueducto fueron inscritos por la UNESCO, reconociendo su valor histórico, urbano y arquitectónico. Desde entonces, la declaración ha marcado profundamente la gestión urbana de la ciudad: limitaciones al tráfico bajo el acueducto, planes de protección del casco antiguo y proyectos de restauración –como los accesos a la muralla y mejoras en calles patrimoniales– son algunas de las iniciativas adoptadas para preservar la integridad del sitio.

Por tanto, la Catedral de Segovia forma parte de un conjunto mayor ya reconocido por la UNESCO, que abarca tanto los monumentos individuales (como la catedral, el Alcázar y el acueducto) como el tejido histórico que conforma la ciudad medieval.

El año 2025 es su año de celebración y con él llega una programación conmemorativa impulsada por la diócesis, el Cabildo Catedralicio, el Ayuntamiento y otras entidades culturales. Entre los actos previstos destacan:

· Exposiciones temáticas sobre los arquitectos, planos originales y tesoros artísticos del templo.

   Conciertos de música sacra y órgano en el interior de la catedral.

  1. Visitas nocturnas por las cubiertas y el interior, con explicaciones históricas y arquitectónicas.
  2. Jornadas académicas y simposios sobre su valor artístico y simbólico dentro del gótico europeo.

·         Actividades para escolares y familias, con talleres sobre arte, historia y patrimonio.

·  Además, se están restaurando algunos espacios menos accesibles del templo para mostrarlos al público durante las celebraciones.

·     La Catedral de Segovia no es solo una joya arquitectónica. Sigue cumpliendo su función religiosa con un calendario activo de misas, celebraciones litúrgicas, procesiones y eventos culturales. Su archivo histórico y su museo albergan obras de Gregorio Fernández, Pedro de Bolduque o Juan de Juni, además de custodiar documentos fundamentales para la historia de la ciudad.

A diferencia de otros templos que han perdido su vínculo con la vida cotidiana, esta catedral mantiene una relación estrecha con la comunidad local. Además, su ubicación en el centro de la ciudad, muy cerca del Acueducto y la Plaza Mayor, la convierte en uno de los puntos más visitados por quienes llegan a Segovia.

Raquel Martín

 Fuente: El Debate