Pesa de deshollinador
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Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Seguía
ordenando armarios cuando me topé con un objeto extraño: una cuerda con una
bola en el extremo.
Una simple pesa
que cae… y resulta que es el apoyo del deshollinador.
Algo que viene
desde arriba, que aunque haya hollín, limpia, protege, previene el fuego.
Esas personas
que aparecen de forma inesperada, o que tienes siempre ahí, que te tienden una
mano, que te dan la palabra oportuna… son las pesas de las que se sirve, o por
medio de las que actúa.
Ser consciente
de esto es ser consciente de que te cuida, de que se ocupa de tus cosas, de que
tienes un valor incalculable para Él.
“No temas,
porque yo estoy contigo; no te inquietes, porque yo soy tu Dios: yo te
fortalezco y te auxilio” Is 41,10
Hoy el reto del
amor es que, cuando acabe el día, pares a dar gracias a Jesús por los momentos
en que te ha lanzado una “pesa de deshollinar”: por medio de un amigo, un
desconocido… descubre a Jesús actuando en tu vida.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
19 julio 2025
Fuente: Dominicas de Lerma