Una luz en la noche
 |
| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Anoche salí a
dar un paseo después de completas. Bajé por los caminos hasta el otro lado del
jardín, y al subir de vuelta, una luz en medio de la oscuridad llamó mi
atención: ¡era una luciérnaga!
Me acerqué con
cuidado, y hasta se dejó sacar unas fotos. Después, más adelante, vi otra en el
borde del camino y, al tomar la foto, me di cuenta de que se veían las dos,
aunque estaban muy distantes la una de la otra.
Me encantó su
visión, y es que tiene razón. Cada uno de nosotros, cada vez que miramos al
Señor, con cada pequeña alabanza o agradecimiento, con cada apuesta por amar,
cada vez que dejamos que Su victoria se manifieste en nosotros, se enciende más
fuerte Su luz en nosotros. ¿Y acaso será poca cosa una luz en medio de la
noche? Para Él, siempre será una alegría ver a los suyos llenos de luz,
iluminando a los que pasan por su lado.
Muchas veces
pensamos que la santidad es para grandes personas y, en cambio, Su luz se
derrama en ti, que hoy le quieres entregar tu vida al Señor para que sea Él
quien te guíe; en ti, que hoy quieres vivir el día con Él; en ti, que has
decidido creer, aun sin entenderlo todo…
Nunca me había
alegrado tanto de ver “un bicho”. ¡Nosotros, en cambio, no somos “bichos
raros”! ¡Somos suyos, tenemos dueño! Llenemos el mundo de la luz del Señor.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
20 junio 2025
Fuente: Dominicas de Lerma
