LA PIEDAD POPULAR DE ESPAÑA TOMA LAS CALLES DE ROMA EN UNA HISTÓRICA PROCESIÓN DURANTE EL JUBILEO

Un reconocimiento a la piedad popular

Crédito: Cortesía/ Jaime Rodríguez

En agosto de 2023, José Luis Aldea, hermano mayor de la Hermandad del Cachorro de Sevilla (España), recibió una llamada inesperada: el Vaticano quería hacerle una invitación que marcaría un hito en la historia de la hermandad.

El Santísimo Cristo de la Expiración del Cachorro, una de las imágenes más veneradas de la Semana Santa sevillana, fue solicitado, junto con la talla de la Virgen María Santísima de la Esperanza de Málaga, para encabezar una histórica procesión por las calles de Roma en el marco del Jubileo de las Cofradías, previsto del 16 al 18 de mayo.

Un proyecto en manos de la Divina Providencia

A pesar de la dificultad del proyecto, era una invitación que no podían rechazar: “En tan sólo una semana, después de hablar con el Arzobispo y la Junta de Gobierno, decidimos empezar el camino para organizar todo”, revela Aldea a ACI Prensa. 

Un proyecto complicado, pero que sin embargo contó con todos los apoyos necesarios para su financiación y logística. “Las cosas que pasan porque creemos en la divina providencia. Cuando algo es tan grande, todo se va hilando y te llega así, hay que estar dispuesto a hacerlo”, indica el hermano mayor. 

Tras varias visitas a la Ciudad Eterna, reuniones con el Dicasterio para la Evangelización y con el Ayuntamiento de Roma, se fueron definiendo todos los detalles. La visita más reciente a Roma tuvo lugar la semana pasada cuando, en el marco de los preparativos de la procesión, una representación de ambas hermandades, junto a la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos de la Junta de Andalucía, Carolina España, pudieron saludar al Santo Padre tras la Audiencia General.

“Charlamos brevemente con él, en mayo podremos reunirnos en audiencia privada”, precisa José Luis Aldea.

Los preparativos, añade, “han sido complejos y llevan muchos meses estudiándose”, especialmente para transportar la talla del Cristo y los enseres (como el ropaje y los adornos), así como el traslado de las 120 personas de la hermandad, entre costaleros, miembros de la Junta de Gobierno y la priostía, aquellos que supervisan todo lo relacionado con el culto externo, como el cuidado de las imágenes, los pasos, la ornamentación y los altares. 

Crédito: Fran Santiago

Aunque no habrá nazarenos (miembros de la hermandad ataviados con sus características capas y capirotes) debido a que no se realiza en Semana Santa, ambas imágenes contarán con un cortejo de aproximadamente 300 hermanos que portarán unos cirios. 

Las cofradías, un freno a la secularización

En los días previos a la procesión, que se celebrará el sábado 17 de mayo, ambas imágenes podrán recibir culto en la basílica de San Pedro del Vaticano. Esto, según indica Aldea, “compensa toda la dificultad del proyecto”.

“En la hermandad ha habido muchas cosas que superar. Mover una talla así no es nada fácil… Se trata de asumir un riesgo, pero que merece la pena por poder dar culto al Santísimo Cristo de la Expiración en el mayor templo de la cristiandad”, afirma. 

El máximo representante de de la Hermandad del Cachorro destaca la importancia de visibilizar el valor de las cofradías, “especialmente en estos tiempos”. 

Aunque “la procesión es lo más llamativo”, remarca que “por primera vez en la historia hay unos días dedicados a las cofradías, que son un freno muy importante a la secularización”, destaca. 

“Viajamos a Roma en representación de todas las hermandades del mundo. Es un orgullo que tienen todos los cofrades. Desde que se hizo público el evento, ha habido más de 1.800 peticiones al Vaticano para sumarse a la procesión”, indica. 

Además, está previsto que ambas imágenes estén presentes también durante la Misa que presidirá el Papa Francisco en la Plaza de San Pedro el domingo 18 de mayo. 

Crédito: Jaime Rodríguez
Un reconocimiento a la piedad popular

Este gran evento supone para el sevillano “un refrendo absoluto” a la piedad popular y “un cambio de postura de la Iglesia desde su cabeza”.

“La formación de los católicos es algo importantísimo, que se tenga una fe profunda, aunque sin menospreciar el imprescindible caldo de cultivo que es la fe del pueblo. La importancia del que sabe mucho y del que no sabe nada. Es un espaldarazo fundamental y un reconocimiento implícito. El Papa Francisco es argentino, latino, y aquí vivimos las cosas de una manera muy determinada”, subraya.

También destaca que es “un orgullo y un honor” poder participar en este evento y ser unos de los protagonistas “de una procesión histórica”.

“Ojalá tenga muchos frutos espirituales. Nosotros sólo nos ponemos al servicio de la Iglesia para una misión: llevar el Evangelio a todas las personas. Espero que nuestras imágenes, y especialmente el Santísimo Cristo de la Expiración, conforte y alimente su fe”, añade. 

Desde el Coliseo hasta el Circo Massimo

La procesión, explica Aldea, “está planteada en los alrededores del Coliseo”. Saldrá de una estructura habilitada en el anfiteatro testigo de los combates de gladiadores y desde allí se dirigirá al Circo Máximo, primer hipódromo de la antigua Roma que se utilizaba como estadio para las carreras de carros y caballos.

Señala también que la procesión no puede realizarse hasta la Basílica de San Pedro porque “caminar por la via della Conciliazione no habría sido posible, ya que con el Año Jubilar está habilitada para los peregrinos. Además, habría sido muy complicado que pasara por ahí el trono de Málaga”, señala a ACI Prensa. 

Por Almudena Martínez-Bordiú

Fuente: ACI Prensa