Mi primer día
Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
El domingo me
estrené como tornera, ¡fue mi primer día en este nuevo oficio! Dentro del
monasterio es un oficio muy bonito, pues la hermana tornera es el primer
contacto con la persona que se acerca al monasterio. Ella se ocupa de acoger
muy brevemente y de dirigir a la persona a su lugar correspondiente
(locutorios, tiendas…).
Sentía una
cierta responsabilidad que me impresionaba…
—Mientras esté
de torno, seré la cara, la voz, la acogida de toda la comunidad —reflexionaba
conmigo misma.
Y, de pronto,
sonó el torno por primera vez en la mañana. Acudí presurosa a atender y, para
mi sorpresa, era nuestra querida Angelines. Una señora del pueblo que, desde
hace muchos años, nos acompaña cada día en nuestra liturgia. ¡Es de la familia!
El Señor me
sacó una sonrisa, porque claramente me decía que el amor siempre se vive
primero en casa. El amor que se entrega hacia afuera, a los demás, es expresión
del que se vive dentro.
Por ello, es
tan importante nuestra relación personal con Cristo. Con Él, experimentamos el
Amor en hechos concretos y sencillos, con los que nos sorprende cada día. Y, de
la misma manera, qué bueno es dejarnos llevar por esa espontaneidad con la que
le manifestamos nuestro amor, y el deseo de que Él ocupe el centro de nuestra
vida.
Desde ahí, el
amor hacia los demás fluye con facilidad. Eso no significa que todo vaya a ser
fácil, o que todo el mundo me caerá bien, pero es que Cristo no necesita esas
casuísticas para hacernos felices, porque la felicidad no depende de que todo
esté bien a nuestro alrededor. Si tenemos bien asentado nuestro cimiento en Él,
el edificio de nuestra vida se construye firme.
Hoy el reto del
amor es comenzar en casa. Las personas que nos rodean son las primeras que nos
necesitan, que esperan nuestra amabilidad, nuestra cercanía, nuestra acogida.
Cristo está en ellas… ¡Que hoy le podamos descubrir precisamente ahí!
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
20 agosto 2024
Fuente: Dominicas de Lerma