La rectoría, la iglesia y las oficinas de la parroquia de Nuestra Señora de África en la localidad de Mazeze, en la Diócesis de Pemba, fueron reducidas a cenizas tras el ataque terrorista del 12 de febrero a la ciudad portuaria de Pemba, capital de la provincia de Cabo Delgado (Mozambique).
![]() |
Parroquia de Nuestra Señora de África. Crédito: Vatican Media. Dominio público |
"Eran
exactamente las 6 p.m. del lunes (12 de febrero) cuando entraron y tomaron el
control del pueblo de Posto Mazeze. Mucha gente ya había evacuado, por
supuesto, pero entraron muy armados", indicó el P. Salvador María
Rodrigues de Brito.
El
P. Rodrigues de Brito agregó: "Los terroristas atacaron la sede del puesto
administrativo de Mazeze, destruyendo la infraestructura de las autoridades
locales, el centro de salud y la escuela local".
Los
terroristas, continuó el sacerdote católico nacido en Brasil, "también
atacaron y destruyeron edificios de la misión, especialmente la rectoría, la
iglesia y la oficina parroquial, algunos de las cuales fueron construidos
recientemente, pero sin víctimas humanas reportadas".
"Todo
fue ametrallado, todo fue arrasado, ni siquiera quedó un solo trozo de ropa",
lamentó el miembro del clero de la Diócesis de Guarulhos de Brasil, agregando:
"Quemaron tiendas de campaña, quemaron casas circundantes, quemaron un
automóvil, incluso quemaron el Centro de Salud en Mazeze".
"Lo
único que saqué de allí fue una maleta pequeña, pensando que volvería en unos
días, así que todo, incluso los documentos, fueron destruidos", dijo el P.
Rodrigues de Brito.
Luego
indicó: "Lo único que se salvó, gracias a Dios, fue el Santísimo
Sacramento y los libros de sacramentos, bautismos y matrimonios, que había
traído conmigo, y el Santísimo Sacramento que estaba en la capilla de la sede
de la misión, que logré llevar conmigo cuando escapé".
La
parroquia de Nuestra Señora de África en Mazeze es la sede del proyecto social "Ventana al Futuro",
y durante el ataque parte del equipo utilizado para implementar el proyecto fue
destruido, incluyendo máquinas de coser.
"Había
sólo seis máquinas de coser, así como otras cosas, en la casa misionera. Todo
lo que estaba allí, la ropa, las vestiduras, todo fue arrasado", lamentó
el sacerdote brasileño.
La
crisis en el norte de Mozambique, que estalló en 2017, se concentra
principalmente en la provincia de Cabo Delgado, pero también se ha extendido a
provincias vecinas, como Nampula y Niassa. Hasta diciembre de 2023, el
conflicto había desplazado a más de un millón de personas.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI
Prensa. Publicado originalmente en ACI África.
Por João
Vissesse
Fuente: ACI
·