¿Sin espinas?
Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al
Señor. Que pases un feliz día.
Aquel pescado que había preparado la hermana
tenía una pinta buenísima. Sin espinas, con un rebozado marinado y bien
frito... parecía tener todos los ingredientes para ser el plato perfecto.
Y sin embargo, en el primer bocado descubrí que
aunque nos lo vendan "sin espinas", en realidad siempre tiene...
Después, me mantuve más atenta para ir separándolas y finalmente pude disfrutar
del plato, que realmente estaba buenísimo.
Muchas veces nos quieren vender las cosas
fáciles, perfectas. Como si se tratara de un pescado "sin espinas" o
de un camino sin piedras que nos hagan tropezar. Y es verdad, a todos nos atrae
lo cómodo y quedamos confundidos al darnos cuenta de que ese camino no es real.
La realidad es que cualquier tarea que
emprendamos conlleva esfuerzo por nuestra parte y requiere la perseverancia de
no rendirnos ante la primera dificultad. Siempre hay alguna "espina"
en la realidad, pero si aprendemos a mirarla tal como es, podemos estar atentos
y separarlas para que no nos impidan seguir adelante.
Cristo siempre nos invita a mirar la realidad,
porque al hacerlo con Él, perdemos todo temor. Así lo hacía con sus discípulos
y así también lo hace con nosotros. A ellos, mientras caminaban juntos por
aquellos senderos evangelizando, les iba preparando el corazón al decirles: "El
Hijo del hombre tiene que ser rechazado, morir y resucitar al tercer
día..." (Lc 9, 22). O también en la última cena: "En el mundo tendrán
luchas, pero tened valor, yo he vencido al mundo" (Jn 16, 33).
Después, ellos cayeron, se levantaron o, más
bien, el Resucitado los levantó y recibieron su Espíritu y seguramente, esto
mismo les sucedió unas cuantas veces más. El Señor no nos promete un camino
fácil. La Fe no hace fácil las cosas, las hace posible. Con Él, la vida es más
bien un sendero de subidas y bajadas, pero una aventura asegurada.
Hoy el reto del amor es mirar tu realidad con
Jesús. Es el primer paso para reconocer las espinas y, aún más importante, para
poder disfrutar del plato buenísimo que Él ha preparado para tu vida.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
25 julio 2023
Fuente:
Dominicas de Lerma