Joseph Pronechen, escritor católico afirmó que invocar a la Virgen María bajo nuestra advocación favorita puede ayudarnos a aumentar nuestra devoción a ella en el Mes del Rosario
Credito: Cortesía de las familias Jaminet, Tierney y el P.Zeller/EWTN |
Algunas
advocaciones conocidas son “Nuestra Señora del Rosario, Virgen de Fátima,
Virgen de Guadalupe, Virgen de la Medalla Milagrosa, Virgen de Lourdes, y Reina
de la Paz”. Pronechen relató algunos testimonios de católicos que al invocar a
María en sus diversos títulos favoritos fortalecieron su devoción y amor a la
Madre de Dios.
Nuestra
Señora del Consuelo y de los Dolores
Jeannie
Ewing, autora con su esposo Ben del libro Parenting With the
Beatitudes: Eight Holy Habits for Daily Living, recordó “que cada
título de María nos imparte gracias específicas”. “Dios permite que se nos
conceda una porción de su corazón cuando nos consagramos a ella [la Virgen María]
bajo cualquier título”.
Compartió
que una de sus devociones favoritas es la Virgen del Consuelo, “porque apela a
su misericordia, que en última instancia apela a la misericordia de su Hijo,
Jesús”.
“Vivimos
en una era en la que se necesita la misericordia gratuita de Dios, no porque la
merecemos, sino porque hay muchas heridas y quebrantamiento en nuestro
interior”, dijo. “El corazón maternal de María es un puente perfecto hacia Dios
[…] ella puede hablar en nuestro nombre [a Jesús] en favor de su misericordia”,
señaló.
Ewing
dijo que junto a Ben también buscan la intercesión de María bajo el nombre de
Nuestra Señora de los Dolores. Se dice que bajo ese título “podemos pedirle que
revele lo que se esconde en nuestro corazón, basándonos en la profecía de Simeón”
en la presentación del Niño Jesús en el templo, que está “vinculada
directamente a los Siete Dolores de María”.
Además,
recomendó que “para experimentar la curación, debemos aumentar nuestro
conocimiento de nosotros mismos, para que podamos confesar con más humildad y
honestidad nuestros defectos en el Sacramento de la Confesión”.
Virgen
de la Leche
El
P. Edward Looney, vicepresidente de la Sociedad Mariológica de América y autor
del libro A Heart Like Mary’s Heart, A Rosary
Litany, dijo
que ama la historia de la Virgen de la Leche, cuya imagen es un retrato del
“Niño Jesús recibiendo su alimento” materno.
Esta
devoción “realmente enfatiza la Encarnación” y la humanidad de Cristo, pues
“Jesús sufrió en todos los sentidos. Lo pasó por todo. Incluso fue amamantado”,
dijo el sacerdote de la Diócesis de Green Bay, Wisconsin (Estados Unidos), y
destacó que hay una gruta en Tierra Santa en honor a esta advocación.
Este
10 de octubre fue coronada canónicamente la imagen mariana que está en el
Santuario Nacional de Nuestra Señora de La Leche en San Agustín, Florida, el
santuario mariano más antiguo de los Estados Unidos. El Papa Francisco otorgó
el reconocimiento por la importancia y santidad de la devoción a Nuestra Señora
de La Leche.
Se
trata de la cuarta coronación canónica de una imagen de esta advocación en el
país.
El
P. Looney dijo que recurre a esta devoción para “rezar por la fertilidad de las
parejas que luchan por concebir”. “Sé de muchas parejas que luchan”, dijo y
comentó que lleva un apostolado de oración personal para pedirle a la Virgen de
la Leche por ellas.
Dijo
que cuando visitó dos veces el santuario de Florida, se ofreció a rezar por la
fertilidad de los esposos que lo necesitan a través de Twitter. Además, hizo
una novena a la Virgen de la Leche justo antes de Navidad, y la respuesta llegó
de una pareja que vive cerca de su casa.
“Una
pareja de mi parroquia había abortado tres o cuatro veces. Les avisaba cada vez
que rezábamos el Rosario durante la novena. Ahora, ella está embarazada y se
espera que dé a luz aquí [a fines] de octubre o noviembre. Atribuyo esto a la
gracia de esa novena y a la devoción que tengo a la Virgen de la Leche”, dijo.
Virgen
de Lourdes
Kendra
Tierney, madre católica de 10 hijos y autora del libro The Catholic All Year Compendium:
Liturgical Living for Real Life , dijo que
junto a su familia tienen una gran devoción a la Virgen de Lourdes desde que su
esposo James fue diagnosticado de cáncer en 2006.
Kendra
relató que cuando eran “miembros de una parroquia dedicada a la Virgen de
Lourdes, a mi esposo le diagnosticaron melanoma en etapa tres”. Dijo que James
inició su primer año de tratamiento cuando ella estaba embarazada y dio a luz a
su cuarto hijo.
Además
de “las cirugías y los medicamentos”, dijo que peregrinaron al Santuario de la
Virgen de Lourdes y con devoción, se sumergieron en las aguas de la fuente con
su bebé.
Cabe
destacar que la inmersión en la fuente de Lourdes fue alentada por la Virgen a
Santa Bernardita en 1858. Si bien esta agua “no debe confundirse con agua bendita”,
“la Iglesia Católica especifica que Dios cura a través de los elementos
naturales y los sacramentos, con la ayuda de la Virgen María y la oración de
los cristianos”, señaló el
Santuario de Lourdes.
Tierney
dijo que su esposo tuvo una larga remisión del cáncer por 15 años, periodo en
el que tuvieron seis hijos más. Hoy James está en la etapa cuatro de la
enfermedad, pero “él continúa equilibrando admirablemente el trabajo y la vida
familiar con sus tratamientos médicos y su fe”, dijo.
Además,
todos los años “hacemos una peregrinación familiar y un picnic a una gruta
local de [el santuario] de la Virgen de Lourdes” en su fiesta, el 11 de
febrero, dijo. “Esperamos, a través de su intercesión, tener muchos más
[momentos así] que esperar”, agregó.
Virgen
de Fátima
Ralph
Martin, presidente de Renewal Ministries, profesor de teología y presentador de
la serie “The Choices We Face” de EWTN, dijo que su “devoción favorita” es la
Virgen de Fátima. Él está convencido que seguir su mensaje de rezar el Rosario
y ofrecer sacrificios “es tan relevante para las circunstancias actuales de la
Iglesia y el mundo”, dijo Martin.
Recordó
que la Virgen María se apareció en Fátima (Portugal), el 13 de octubre de 1917
a tres niños pastores y se identificó como Nuestra Señora del Rosario. “Sus
conmovedoras palabras de que tanta gente se va al Infierno, porque tan poca
gente está rezando y ofreciendo sacrificios por ellos necesitan ser más
conocidas”, dijo.
Además,
destacó que “el ejemplo de los tres niños de Fátima, que respondieron de todo
corazón al pedido de María de ofrecer oraciones y sacrificios para la
reparación de los pecados y la conversión de los pecadores, necesita ser más
conocido”.
Para
él, “el mundo corre un peligro aún mayor que entre la Primera y la Segunda
Guerra Mundial”, por eso “la súplica de María de arrepentirnos y volvernos a
Dios es aún más relevante hoy. Su petición de que recemos el Rosario todos los
días por la paz mundial sigue siendo urgente”.
Nuestra
Señora de la Paz
Emily
Jaminet, madre católica de siete hijos, directora de la iniciativa “The Sacred
Heart Enthronement Network”, y autora de Secrets of the Sacred Heart, dijo que la
devoción mariana que más significado tiene para ella ahora es Nuestra Señora de
la Paz, “porque nos da la esperanza de tener paz en nuestro hogar, en nuestros
corazones y paz en el mundo”.
“Ella
desea acercarnos a su Hijo y, como resultado, trae paz a nuestra vida. Ella no
solo detiene las guerras, sino que facilita la paz interior, a través de la
distribución de las gracias de Jesús, especialmente, a través del Santo
Rosario”, señaló.
Jaminet
dijo que reflexiona sobre la devoción a la Virgen de la Paz con sus hijos
cuando se reúnen a rezar por las tardes. Además, dijo que la devoción a María
es parte de su vida diaria, y que para sus hijos es un “regalo” visitarla.
Relató
que cada semana, antes del juego de voleibol de su hija María de quinto grado,
visitan la gruta mariana local. “La semana pasada, mi hijo de kindergarten
dijo: ‘Mamá, es hora de ir a ver a Mary’”, y no se refería a su hermana, sino a
que “es hora de rezar a la Madre de Dios”.
Jaminet
dijo que los domingos en la noche se reúnen en familia con las Hermanitas de la
Inmaculada Concepción en Columbus, Ohio, para rezar el Rosario. “Cuando hacemos
de la oración algo ordinario, se construye una base para la vida”, dijo.
Además,
relató que su familia suele visitar los santuarios marianos locales. “Vamos con
los niños a las iglesias, rezamos y les recordamos su importancia, en especial,
de Nuestra Santísima Madre durante este mes [de octubre]”, que es el mes del
Rosario.
“Octubre
es un mes poderoso para que las familias vuelvan a comprometerse a practicar la
cultura católica en sus hogares, a través de la oración a la Virgen”, afirmó.
“Este mes sagrado es una oportunidad para recibir gracias espirituales y
establecer ‘hábitos santos’” y me encanta, “porque nos esforzamos por
acercarnos más a María, la Madre de Dios”, concluyó.