Si bien el
milagro eucarístico que motivó al Papa Urbano IV a instituir la Solemnidad del
Corpus Christi fue el de Bolsena (Italia) en 1263, ha habido muchos
acontecimientos sorprendentes a lo largo de los siglos, incluidos algunos en
años recientes.
Dominio público |
1. Italia (750 d.C.): El milagro de Lanciano
El milagro de la ciudad de Lanciano, en la región de Abruzzo, es
uno de los más antiguos y el más importante para Italia.
Se produjo en el año 750 cuando un monje, que tenía dudas sobre la
presencia real de Cristo en el pan y el vino, pronunció las palabras de
consagración durante una Misa que celebraba en el monasterio de San Longino. De
repente, el monje “vio cómo el pan se convertía en carne y el vino en sangre.
Todo fue mostrado a los presentes”, señalan los documentos oficiales del
Santuario del Milagro Eucarístico de Lanciano o Iglesia de San Francisco.
Doce siglos después, los fieles aún visitan y contemplan la
reliquia que contiene la hostia del milagro, que en realidad es tejido humano
en estado fresco y sangre coagulada.
El milagro fue sometido a diversos exámenes científicos entre 1574
y 1886. El más importante fue el realizado en la década de 1970 bajo el
compromiso del Dr. Eduardo Linoli, director del hospital de Arezzo. En éste se
descubrió que la sangre y la carne son humanas, de tipo AB, el mismo tipo de
sangre que se encuentra en el Sudario de Turín.
Además, en 1973 la Organización Mundial de la Salud eligió una
comisión médica para verificar los hallazgos iniciales. Después de 500 exámenes
se verificaron los hallazgos y “declararon sin duda que es un tejido vivo”,
algo científicamente inexplicable, según informa el Santuario del Milagro.
2) El Corporal de Bolsena
Jesús había pedido a la beata Juliana de Cornillon (1258) la
introducción de la fiesta del “Corpus Christi” en
el calendario litúrgico de la Iglesia. El sacerdote Pedro de Praga, de Boemia,
celebró una Misa en la cripta de Santa Cristina, en Bolsena, y entonces,
ocurrió el milagro: de la hostia consagrada cayeron gotas de sangre sobre el
corporal… El Papa Urbano IV (1262-1264), residía en Orvieto y ordenó al obispo
Santiago llevar las reliquias de Bolsena a Orvieto. El Papa emitió la Bula Transiturus de mundo,
el 11 de agosto de 1264, donde prescribió que el Jueves después de la octava de
Pentecostés, sea celebrara la fiesta en honor del Cuerpo del Señor. Santo Tomás
de Aquino fue encargado por el papa de componer el Oficio de la celebración. En
1290 fue construída la Catedral de Orvieto, llamada “lirio de las catedrales”.
Actualmente, este corporal se mantiene en exhibición en la
catedral de Orvieto.
3) El milagro de Casia
Ocurrió en un pueblo de Italia, Casia, en 1330. Un
sacerdote había perdido su respeto por la Eucaristía y
ejercía su ministerio sin gusto y por rutina.
Le llamaron para que llevara la comunión a un enfermo. En esa
época esto se hacía solemnemente y tocando la campanilla por el camino. El
sacerdote, lejos de hacerlo así, colocó además la Hostia consagrada dentro
del Breviario para transportarla sin el menor respeto ni delicadeza.
Cuando llegó a casa del enfermo, al abrir el libro, se encontró
con dos manchas de sangre, una en cada página entre las que había depositado la
Sagrada Forma.
Una de las páginas se conserva en Perugia (con un perfil del
rostro de Cristo que se formó después en la mancha) y la otra, con la Hostia
adherida, en el Monasterio Agustino de Casia, donde se venera.
4) El
milagro Eucarístico a Santa Clara de Asís
En el milagro de Asís (Italia), 1240, Santa Clara, libró a las
hermanas de su comunidad, de la amenaza de lo soldados sarracenos que habían
llegado hasta el claustro del convento, y lo logró alzando frente a los
soldados el Santísimo Sacramento, al tiempo que imploraba de Éste el auxilio
inminente que necesitaban.
Desde el tabernáculo pudo oírse una voz que decía “Yo te protegeré siempre”, y a
la petición de la Santa, de que protegiera también la ciudad, añadió, “tendrá que soportar
dificultades, pero será defendida por mi protección”. Fue
así como los soldados retrocedieron, abandonando el convento.
5) El
milagro Eucarístico a San Juan Bosco
En 1848, Italia, San Juan Bosco estaba celebrando una misa a la
que asistían 360 jóvenes, cuando se dio cuenta de que sólo tenía ocho Hostias.
Sin embargo, con ellas pudo dar la Comunión a todos, en una
manifiesta y bellísima multiplicación milagrosa en la que Jesús como en el
Evangelio, quiere que todos se sacien y en este caso no ya de simple pan, sino
de Sí mismo.
Fuente: ACI/Arguments