El
arzobispo castrense remarcó que la sociedad española «es mucho más sana de lo
que creíamos, porque la solidaridad no se improvisa»
El
presidente de Cáritas, Manuel
Bretón, ha expresado su preocupación por el «desamparo extremo» de las
personas sin hogar y de aquellas que viven «en condiciones infrahumanas» en
asentamientos, como los trabajadores que recogen fruta en localidades como
Huelva o Almería.
Así
lo ha declarado durante su participación en el último desayuno informativo de
esta temporada en Nueva Economía Fórum, donde ha destacado el ejemplo de la
sociedad española ante la pandemia del coronavirus. «Todo el mundo sabe que
Cáritas es Iglesia y estamos orgullosos de la colaboración de los españoles».
Durante
su intervención, Bretón ha explicado que el apoyo de la confederación a las
personas vulnerables «se ha triplicado en los últimos meses», porque lo que ha
ocurrido «ha sido inmensamente desolador».
Y
es que Cáritas calcula que el incremento del desempleo entre las personas en
riesgo de exclusión entre febrero y abril es ocho veces superior al de la
población general y en la población atendida por Cáritas, la tasa de desempleo
ha aumentado 20 puntos, ocho veces más que en el resto de trabajadores.
El
presidente de la organización ha reconocido que «su quebradero» es «la
protección de los derechos humanos de los más vulnerables, de esos descartados»
que se han multiplicado. «Ojalá algún día tuviésemos que cerrar Cáritas porque
hemos dejado de ser necesarios, pero de momento no lo veo», se lamentó Bretón.
Durante
el encuentro ha intervenido el arzobispo castrense, Juan del Río, quien destacó que «el Ejército español ha tenido
siempre un sentido social y de ayuda humanitaria. En estos 30 años que lleva
realizando misiones internacionales a lo largo del mundo ha servido de puente
para ayudar a Cáritas y a otras instituciones para llegar a los refugiados y a
las personas más necesitadas».
En este sentido, el arzobispo castrense remarcó que la sociedad española «es mucho más sana de lo que creíamos, porque la solidaridad no se improvisa». A este respecto, recordó las ayudas de asociaciones de vecinos a los más vulnerables y la ayuda de los conventos en la fabricación de mascarillas.
Por
su parte, Bretón ha reconocido «la gran labor humanitaria y el sentido social»
que lleva realizando el Ejercito desde hace 30 años y que actúa como «puente
para trasladar la ayuda de Cáritas y de otras ONG a los refugiados y los más
necesitados» en muchos países del mundo.
Ingreso Mínimo Vital
Preguntado
el Ingreso Mínimo Vital, Manuel Bretón ha destacado que «es un paso decisivo
contra la pobreza severa» y ha valorado positivamente que el ministro José Luis Escrivá les pidiera
colaboración para poner en marcha esta medida, «que desde Cáritas se venía
reclamando desde hace años y que debe ser complementario con el empleo y su
promoción».
Fuente: Ecclesia