El
Papa Francisco subrayó que Jesús no solo es el pastor, “sino la ‘puerta’ por la
que se entra en el rebaño
Al
presidir la Misa en la capilla de la Casa Santa Marta en el Vaticano en el
Cuarto Domingo de Pascua, Domingo del Buen Pastor, el Papa Francisco exhortó a
que el testimonio de sacerdotes y médicos, muchos de ellos fallecidos
atendiendo enfermos de coronavirus COVID-19, “nos ayude a cuidar del santo
pueblo fiel de Dios”.
De
acuerdo a Vatican News, el Santo Padre señaló que
recordar a Jesús el Buen Pastor “me hace pensar en tantos pastores que en el
mundo dan su vida por los fieles, incluso en esta pandemia, muchos, más de 100
aquí en Italia han fallecido. También pienso en otros pastores que se preocupan
por el bien de la gente, los médicos. Se habla de los médicos, de lo que hacen,
pero hay que tener en cuenta que, sólo en Italia, han fallecido 154 médicos, en
un acto de servicio”.
Reflexionando
sobre las lecturas y el Evangelio del día, el Papa Francisco subrayó que Jesús
no solo es el pastor, “sino la ‘puerta’ por la que se entra en el rebaño. Todos
los que vinieron y no entraron por esa puerta eran ladrones o bandidos o
querían aprovecharse del rebaño: los falsos pastores”.
“Y
en la historia de la Iglesia ha habido muchos de estos que explotaron el
rebaño. No les interesaba la grey, sino solo hacer una carrera o la política o
el dinero. Pero el rebaño los conocía, siempre los conoció e iba a buscar a
Dios en sus caminos”, dijo.
“Pero
cuando hay un buen pastor, hay un rebaño que sigue adelante, que continúa. El
buen pastor escucha al rebaño, conduce al rebaño, cura al rebaño. Y la grey
sabe distinguir entre los pastores, no está mal: el rebaño confía en el buen
pastor, confía en Jesús”, añadió.
El
Papa subrayó que “el estilo de Jesús debe ser el estilo del pastor, no hay
otro”.
“Uno
de los signos del buen pastor es la mansedumbre, es la mansedumbre. El buen
pastor es manso. Un pastor que no es manso no es un buen pastor. Tiene algo
escondido, porque la mansedumbre se muestra tal cual es, sin defenderse”, dijo.
“Por
el contrario, el pastor es tierno, tiene esa ternura de la cercanía, conoce a
las ovejas una a una por su nombre y cuida de cada una como si fuera la única,
hasta el punto de que cuando llegan a casa después de un día de trabajo,
cansados, se da cuenta de que le falta una, sale a trabajar otra vez para
buscarla y la lleva consigo, la lleva sobre sus hombros. Este es el buen pastor,
este es Jesús, este es quien nos acompaña en el camino de la vida, a todos”,
aseguró.
Fuente:
ACI Prensa