DEBATE TRAS EL COVID-19: "LA RECONSTRUCCIÓN DE LA SOCIEDAD PASA POR REFORZAR LA FAMILIA"

Mayor Oreja, María San Gil y Bullón de Mendoza reúnen a 800 personas en directo en el debate online "El fin de nuestro modelo de sociedad"

Conferencia online ¿El fin de nuestro modelo de sociedad?
Un debate tras el Covid-19
Tres Fundaciones de inspiración cristiana organizaron ayer un debate online que siguieron cerca de 800 personas en directo. 

La Fundación Valores y Sociedad, la Fundación Villacisneros, y la Asociación Católica de Propagandistas, que habitualmente celebran conferencias multitudinarias en el auditorio de la Mutua Madrileña, convocaron al debate telemático: "¿El fin de nuestro modelo de sociedad? Un debate tras el Covid-19”.  

Alfonso Bullón de Mendoza, presidente de la ACdP, Íñigo Gómez-Pineda, presidente de la Fundación Villacisneros y Jaime Mayor Oreja, presidente de la Fundación Valores y Sociedad, moderados por María San Gil, vicepresidenta de la Fundación Villacisneros, hablaron del modelo de sociedad que se vislumbra tras la crisis sanitaria y económica debido al coronavirus. 

Un Estado que se erige en propietario

Abrió el debate Bullón de Mendoza quien hizo un recorrido del modelo de sociedad actual desde la revolución francesa pasando por el marxismo, con unos postulados que aclaman que la sociedad debe "ser salvada" de ciertos poderes "que la oprimen". 

Pero, para éstos, "la salvación no viene de Dios que ha dado la vida, sino del hombre". En esta línea, para Bullón de Mendoza, el Gobierno actual se guía por los mismos postulados: "Ante esta crisis sanitaria nos encontramos con un Estado que se erige en propietario" de la vida de los ciudadanos y, por lo tanto, "la salvación, para ellos, vendrá del Estado". 
Ante esta amenaza, considera que la alternativa pasa por la unión de los partidos de derechas, capaces de hacer frente a la visión estatalista del actual Gobierno Sánchez-Iglesias.

Reforzar a la institución familiar 

Además, en su opinión, "esta pandemia nos ha permitido poner en valor la importancia de la familia, y la convivencia” y abogó por una vuelta a lo religioso, que tiene que abanderar la "derecha". "La reconstrucción de la sociedad pasa por la familia", aseveró. 

Una idea con la que María San Gil estaba totalmente de acuerdo: "Algo que hemos aprendido de esta pandemia es el valor de la familia". 

Por su parte, Iñigo Gomez-Pineda, presidente de la Fundación Villacisneros, fue el más contundente contra el Gobierno actual social-comunista: “Hay que poner en evidencia el fracaso de las políticas del gobierno, ya que vamos a tener que cumplir condiciones para que Europa nos ayude". 

Así mismo, abogó por el impulso de la iniciativa privada para salir de esta crisis. A preguntas de este Confidencial sobre cuál sería entonces el papel del Estado ante esta crisis y cómo debe ayudar a tantas personas que se han visto en la ruina, consideró que es la "iniciativa privada" quien debe ayudar a los más débiles y es el Estado quien debe "marcar el terreno de juego" para que los demás contribuyan a crear riqueza. 

Por último, Gómez-Pineda acusó a Europa de haberse olvidado de Dios, una Europa "falsa y descreída". 

Cambio jerarquía de valores 

En el turno de Jaime Mayor Oreja, comenzó confesando las "tres lecciones" que ha sacado de la pandemia: l"o vulnerables que somos, la cercanía de la muerte, y un cambio en la jerarquía de valores, distinguir lo esencial de lo accesorio”. 

Además, hizo un llamamiento a la sociedad civil que "debe estar presente en el debate de nuestro modelo de sociedad que está hoy sobre la mesa. El coronavirus ha sido un catalizador del desorden previo que había”. 

Por último, concluyó advirtiendo del gran riesgo al que se enfrenta la sociedad posterior a la pandemia: “Hay un gran riesgo con el gobierno, la democracia y la libertad: están en peligro, pero el mayor riesgo es que no seamos capaces de formar una alternativa". 

Maria San Gil concluyó el debate con un mensaje positivo: Tenemos la responsabilidad de dar respuestas, y hay interés. Muchísimas gracias a las más de 800 personas que son han seguido en directo”.



Fuente: ReligionConfidencial