4 Domingo Pascua (Ciclo C)
MONICIÓN DE ENTRADA
Buenos días, sed bienvenidos a la celebración del día
del Señor.
Hoy celebramos el domingo del Buen Pastor. El Señor,
con su resurrección se ha quedado con nosotros, nos acompaña, nos defiende y
nos conduce por las encrucijadas de nuestra vida hacia la casa del Padre. A
poco que estemos atentos no dejaremos de reconocer su cuidado providente.
En este domingo del Buen Pastor, la Iglesia nos invita
a orar por la vocaciones al ministerio y a la vida consagrada y, de un modo
especial, por las vocaciones en los países de misión. Ofrezcamos esta
Eucaristía para que el Señor envíe obreros a su viña.
MONICIÓN A LAS LECTURAS
El pastor conoce su rebaño y su rebaño le
conoce a él. Lo mismo pasa entre Jesús y los que somos miembros de su Iglesia.
El Señor nos conoce íntimamente. Él antes de ser Pastor ha sido Cordero y ha
experimentado las dificultades y complicaciones que muchas veces supone nuestro
vivir.
Estamos en sus manos y nada, salvo que
nosotros no lo queramos, nos podrá arrancar de su amor.
Escuchemos con atención las lecturas que hoy
nos ofrece la Liturgia y acojamoslas con fe, para que ellas nos unan más a
Cristo, Buen Pastor.
ORACIÓN DE LOS FIELES
A cada petición
respondemos: ¡Señor, cuida de nosotros!
- Por los
pastores de la Iglesia, para que ejerciendo su representación de Cristo, Buen Pastor,
cuiden con caridad pastoral del Pueblo de Dios. OREMOS.
- Por nuestros políticos que han iniciado un nuevo proceso electoral,
para que sus propuestras programáticas tengan como objetivo el bien de sus
pueblos, ciudades y comunidades. OREMOS.
- Por los jóvenes
de nuestra tierra y, en especial, de los países de misión, para que, atentos a
la Palabra divina, escuchen la llamada de Cristo para participar de su misión
evangelizadora. OREMOS.
-
Para los que
han escuchado la llamada del Señor a la consagración religiosa o al ministerio
sacerdotal, para que las dificultades o tentaciones que puedan sufrir no les
haga desertar de su compromiso vocacional. OREMOS.
-
Por todos los que formamos parte de nuestra parroquia, para que en este tiempo
pascual profundicemos en nuestra vocación bauitsmal. OREMOS.
ORACIÓN FINAL
Jesús, Pastor bueno,
te damos gracias porque a cada uno de
nosotros
nos has buscado por los rincones de nuestra
vida
y nos has llevado a formar parte de tu
Iglesia;
Tú nos has llamado por nuestro nombre
y nos has hecho familiares de nuestro Padre,
Dios.
Jesús, Cordero inmaculado,
¡Cómo agradecerte que para llevarnos al
Padre,
te hayas metido en los abismos que nos
cercan!
¡Cómo estar a la altura de tu amor
si por rescatarnos de mal y de la muerte
te has entregado en la Cruz por nosotros!
Hijo del Padre, Hermano
nuestro y Buen Pastor,
no permitas que nada nos separe de Ti;
defiéndenos de las seducciones del maligno enemigo
y haz que en toda circunstancias
nos confiemos en tu amor.
Señor, derrama sobre nosotros tu Espíritu,
para que su gracia nos introduzca
en la comunión divina que Tú tienes con el
Padre.
Amén.