Las autoridades se
apresuran a encontrar más cuevas antes de que sean saqueadas
Tamarah | CC BY-SA 2.5 |
Arqueólogos
de la Universidad Hebrea de Jerusalén estaban excavando una cueva en los
acantilados al oeste de Qumrán, en la orilla noroeste del Mar Muerto, cuando
descubrieron pruebas que apuntan a que alguna vez fue el escondite de otro
pergamino del Mar Muerto. El equipo de excavadores es el primero en descubrir
una nueva cueva de pergaminos en 60 años.
La
excavación fue un esfuerzo conjunto de la Universidad Hebrea y la
Administración Civil de Judea y Samaria, la Autoridad de la Naturaleza y
Parques de Israel y la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA). El trabajo se
llevó a cabo en el marco de la nueva “Operación Pergamino” iniciada desde la
IAA para llevar a cabo estudios sistemáticos y excavar las cuevas en el
desierto de Judea.
En
su sitio web, la Universidad Hebrea informó
de sus descubrimientos:
La excavación de la cueva
reveló que hubo un tiempo en que contenía pergaminos del Mar Muerto. Numerosas
tinajas y tapas del periodo del Segundo Templo se encontraron escondidas en
nichos a lo largo de las paredes de la cueva y en lo profundo de un largo
túnel, en su parte posterior. Las tinajas estaban todas rotas y su contenido
extraído, y el descubrimiento hacia el final de la excavación de un par de
cabezas de picos de hierro de la década de 1950 (almacenadas dentro del túnel
para su posterior uso) prueba que la cueva fue saqueada.
Aunque
no se recuperó ningún pergamino del sitio, los eruditos reconocen la abrumadora
evidencia de la presencia de los pergaminos y han sugerido que sea numerada
como Cueva 12. Esta no es la primera vez que una cueva ha sido numerada sin
encontrar un pergamino real; la Cueva 8 fue designada de manera similar.
El
doctor Oren Gutfeld, director de la excavación, comentó:
Esta emocionante
excavación es lo más cerca que hemos estado de descubrir nuevos pergaminos del
Mar Muerto en 60 años. Hasta ahora, se aceptaba que los pergaminos del Mar
Muerto solo se encontraban en 11 cuevas de Qumrán, pero ahora no hay duda de
que esta se trata de la duodécima cueva. Encontrar esta cueva de pergaminos
adicional significa que ya no podemos estar seguros de que las ubicaciones
originales (Cuevas 1 a 11) atribuidas a los pergaminos del Mar Muerto, que
llegaron al mercado a través de los beduinos, sean exactas.
El
doctor Gutfeld continuó explicando que encontraron un trozo de pergamino
antiguo, pero que estaba siendo procesado y aún no se había escrito sobre él.
Otros artefactos encontrados en la cueva incluyen los frascos en los que se
escondían los pergaminos y su cubierta, una correa de cuero para atar el
pergamino, un paño que envolvía los pergaminos, tendones y trozos de piel que
conectaban fragmentos, y otros.
Este
es el primer intento de la “Operación Pergamino” para encontrar nuevos sitios
donde los pergaminos del Mar Muerto puedan estar ocultos. Los hallazgos han
mostrado ser muy prometedores para la iniciativa que, según afirma Israel
Hasson, director general de la Autoridad de Antigüedades de Israel, está en una
carrera a contrarreloj:
El importante
descubrimiento de otra cueva de pergaminos atestigua el hecho de que queda
mucho trabajo por hacer en el desierto de Judea y que los hallazgos de gran
importancia aún están esperando ser descubiertos. Estamos en una carrera a
contrarreloj, ya que los ladrones de antigüedades roban activos patrimoniales
en todo el mundo para obtener beneficios económicos. El Estado de Israel necesita
movilizar y asignar los recursos necesarios para poner en marcha una operación
histórica, junto con el público, para llevar a cabo una excavación sistemática
de todas las cuevas del desierto de Judea.
J.P.
Mauro
Fuente:
Aleteia