De preparativos
Hola,
buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Durante
el día de ayer, en todos los momentos que encontré, me dediqué a buscar
villancicos clásicos, a prepararlos, a repasarme los ritmos con la guitarra...
Y es que ya es tradición: al acabar la celebración de la Misa del Gallo, muchas
personas se acercan a felicitarnos la Navidad y a cantar con nosotras unos
villancicos.
Hasta
ahora lo hacíamos en plan “a capella”, con la genialidad de la improvisación, y
la verdad es que nos divertimos mucho juntos; pero este año me han propuesto
acompañar con la guitarra. Lo cierto es que no me podía negar a ello; esta
noche es la noche de la entrega.
Sí,
sí, la noche de la entrega: Dios Padre nos entrega a su Hijo, lo deja en
nuestras manos, nos entrega nuestra salvación en un bebé indefenso y
vulnerable. También es la entrega de María, quien da a luz un Hijo, pero Ella
no se lo apropia, sino que comprende bien que su Hijo es para entregárnoslo a nosotros.
Y,
aquella noche, todos los que escucharon el anuncio del Ángel, se pusieron en
camino hacia el establo de Belén... y estoy segura de que cada uno, al verle,
le fue entregando algo...
Tantas
madres preparan sus mejores recetas con todo el cariño para sus familias,
tantos sacerdotes se levantan corriendo de la mesa para celebrar la Misa de
Gallo... Así esa noche se cumplirá la palabra del evangelio que dice: “Lo que
hicisteis con uno de estos, conmigo lo hicisteis”.
Mañana
es la Noche Buena, es la noche de la entrega, ¿y tú? ¿Qué Le vas a entregar?
Hoy
el reto del amor es pensar algo en lo que puedas entregar un poco de ti a los
demás. Hoy más que nunca apuesta por el amor, deja que el Señor te susurre al
corazón lo que puedes entregarle en la Noche Santa.
VIVE
DE CRISTO
Fuente:
Dominicas de Lerma
