“La casa de Dios debe ser respetada, pues es un lugar reservado para el culto divino. De manera que es preciso observar las formas establecidas para ello”
![]() |
Crédito: Arquidiócesis Primada de México |
Una “influencer” española visitó recientemente Ciudad de México e
ingresó a una iglesia católica vistiendo unos “shorts”, pantalones cortos. La
joven fue increpada duramente por una feligrés, y el video del altercado se
viralizó. Un sacerdote mexicano advierte que “la casa de Dios debe ser
respetada”.
Desde el 5 de junio circula en redes sociales un video que
muestra un incidente en las puertas de la parroquia San Juan Bautista, en la
alcaldía de Coyoacán, al sur de la Ciudad de México. El video muestra cómo una
feligresa local confronta a visitantes extranjeros, incluida la conocida
“influencer” española “Mayichi”, por estar dentro del recinto religioso con una
falda corta con un pequeño short debajo.
“Esta es mi iglesia y no pueden entrar con shorts”, reclamó la
mujer grabada en el video, y agregó: “si es católica, sabe que hay
reglas”.
El video rápidamente se difundió en diversas plataformas,
generando una ola de comentarios. Muchos internautas mostraron su apoyo a la
influencer, defendiendo su derecho a vestirse como desee y criticando la
actitud de la feligresa.
¿Qué dice la Iglesia Católica sobre el uso de ropa en los templos?
La Arquidiócesis Primada de México, a
través de su semanario Desde la fe, consultó al P. José Alberto Medel,
sacerdote de la Diócesis de Xochimilco y experto en Liturgia, para aclarar las
normas y el contexto del incidente.
El sacerdote explicó que “si bien los templos están abiertos a
todo mundo, no son espacios públicos”.
“La casa de Dios debe ser respetada, pues es un lugar reservado
para el culto divino. De manera que es preciso observar las formas establecidas
para ello”, subrayó.
“Yo frecuentemente digo a mis feligreses que hay lugar para todo:
para pasear, para hacer deporte, para divertirse, para ver espectáculos, para
hacer fiestas; y también lugares para orar y alabar a Dios; es decir, para el
culto divino”, señaló.
Indicando que cada sitio tiene su código de vestimenta, el
sacerdote hizo un llamado a las personas que asisten a lugares de devoción, a
que vayan “debidamente vestidos”.
El decoro en la Iglesia Católica
Los templos e instalaciones de la Iglesia Católica son espacios
que requieren de un especial decoro. Como ejemplo, el
sitio web de los Museos Vaticanos señala que en sus instalaciones, así
como en la Capilla Sixtina, en la Basílica de San Pedro y en los Jardines
Vaticanos “sólo se permite a los visitantes vestidos decorosamente”.
“No se admiten prendas sin mangas y/o escotadas, ni pantalones
cortos que no cubran hasta las rodillas, minifaldas o gorras”, precisa el sitio
web.
“El decoro se extiende también a objetos personales visibles, así
como a signos distintivos personales igualmente visibles (como por ejemplo
tatuajes), que puedan ofender la moral católica, la religión católica y el
sentimiento común de pudor”, añade.
Disposiciones similares se aplican en los templos católicos de
todo el mundo.
La corrección, una “oportunidad de catequizar”
Por otro lado, P. Medel aclaró que, “aunque es legítimo pedir respeto
para un lugar sagrado, lo conducente es hacerlo con palabras que pueden ser una
catequesis, y no mediante gritos que se conviertan en ofensas”.
Respecto al video, el sacerdote advirtió que la persona que hace
la corrección “comete una desmesura, una desproporción con la que termina
haciendo lo mismo que critica: faltar el respeto a este espacio con los modos
que utiliza”.
“Desaprovecha la oportunidad de catequizar que le pone de frente
dicha situación. Tal vez esas personas no son creyentes y les parece normal
entrar vestidos así; de manera que lo que hay que hacer es ayudarles a
comprender que nosotros tanto creemos que procuramos honrar esos espacios
incluso con nuestra vestimenta”, puntualizó el P. Medel.
El sacerdote mexicano lamentó que “la desmesura es el sello
distintivo de nuestros tiempos”, ya que mientras “los visitantes pasan por alto
que, aunque se trata de un templo con valor histórico, artístico y cultural, es
también un espacio sagrado que se debe respetar”.
La mujer que los buscaba corregir, lamentó, “no comprende que su
actitud no es piadosa, que no abona en nada, y que, más aún, es contraria a los
valores cristianos”.
Finalmente, el P. Medel le sugirió a los sacerdotes que están a
cargo de parroquias que reciben muchos turistas “colocar letreros o poner a
personas que informen a los visitantes sobre las maneras adecuadas de vestir y
de comportarse al interior, ya que también se puede ir muy bien vestido y
realizar acciones imprudentes”.
Por Diego López Colín
Fuente: ACI Prensa